miércoles, 15 de junio de 2016

ALFONS MUCHA: LA SEDUCCIÓN DEL "ART NOUVEAU".



Buen día.

Hoy damos paso a varias de las mas deliciosas expresiones de las artes plásticas que se concentran todas ellas en una misma persona, ALFONS MUCHA, reconocido cartelista, escultor, grabador, diseñador y artesano.
Evidentemente se le considera un artista polifacético, enmarcardo entre finales del siglo XIX y principios del XX, y mas que claro exponente del Art Nouveau francés.






Nacido el 24 de julio de 1860 en la ciudad de Ivancice (Moravia), desde pequeño demostró una especial habilidad para el canto, estudiando la correspondiente educación secundaria en Brno. capital de Moravia, mas sus preferencias le dirigieron hacia el dibujo, siendo la suya una especial dedicación al diseño tanto en pintura decorativa, como en la de escenarios para obras teatrales, que llevó a cabo en Viena.





Desgraciadamente, y como consecuencia de un incendio que destruyó todo el negocio de aquéllos para los que ejercía su trabajo, se decidió por regresar a Moravia, empezando a trabajar de forma independiente, tanto en pintura como en decoración. 
Sus primeras obras fueron por encargo del Conde Kart Khuen de Mikuloh, que al considerarlas de su agrado, pues se decidió por promocionarle y ayudó para estudiar en la Academia de Bellas Artes de Munich.





Es cierto que fue masón, llegando a ser Gran Maestro de la Gran Logia de Checoslovaquia, lo que llevaba a interesarse por todo lo relacionado con el espiritismo.
En el año 1887 se trasladó a Paris, decidiéndose a estudiar en la Académie Julian y en la Académie Colarossi, a la vez que ya se ocupaba de que vieran la luz sus primeras ilustraciones tanto en revistas como en publicidad. 
Mas fue un cartel significativo el que le lanzó a la fama, el litográfico de la actriz Sarah Bernhardt y su Théatre de la Renaissance, dedicado a la obra Gismonda de Victorien Sardou.





Gracias a la publicidad que alcanzó el cartel en cuestión, Sarah Bernhardt firmó un contrato con Alfons Mucha por plazo de seis años, con su exclusiva. La fama de la actriz hizo que Mucha alcanzara cotas de similar conocimiento entre el público en general.
La obra de Mucha se caracteriza, fundamentalmente, por llevar a cabo una apuesta por un nuevo arte, sirviéndose por composiciones innovadoras y exclusivas, valiéndose de líneas suaves, a las que unía motivos florales y vegetales, y todo ello junto a la siempre bellísima aportación de una mujer del todo seductora.




No obstante, el arte de Mucha conoció otra diferente forma de expresión y fue el diseño de alhajas, realizado para el joyero parisino Georges Fouquet, diseños que fueron presentados en la Exposición Universal de Paris de 1900, y ello unido a que también diseñó los interiores de la joyería de Fouquet.

El trabajo de Mucha no solo era de una calidad sorprendente, sino que a la misma unía una ingente cantidad, con sus jóvenes siempre rodeadas de deliciosos halos de flores que enmarcaban sus cabezas, si bien, en cierto momento quiso dar una nueva visión a su arte, aportándole un estilo más espiritual.




Visitó EE.UU. entre los años 1906 y 1910, regresando posteriormente a Praga, con la finalidad de decorar el Teatro de Bellas Artes, y diferentes lugares emblemáticos de la ciudad.
Tras la independencia de Checoslovaquia, después de finalizada la Primera Guerra Mundial sus diseños lo fueron también para postales, sellos, e incluso billetes de banco. 




No obstante, gran parte de su vida la dedicó a la realización de una serie de grandes pinturas -La Épica Eslava- a la que consideró su obra maestra y que, una vez terminada, fue donada a la ciudad de Praga, en 1928.

La Primera Guerra Mundial marcó y mucho la vida de Alfons Mucha pues fue arrestado y perseguido, y en su memoria quedó siempre grabado este episodio tan doloroso.
Su fallecimiento ocurrió en Praga, el 14 de julio de 1939, debido a una pulmonía, y sus restos reposan en el cementerio de Vysehrad.





Con el tiempo el interés por la obra de Mucha se fue diluyendo, mas gracias a la labor de su hijo, el autor Jiri Mucha, quien se decidió por tratar la obra de su padre, es conocido a nivel internacional.




Y para aquéllos que queráis disfrutar en vivo y en directo de Alfons Mucha, Roma nos ofrece la oportunidad de contemplar gran parte de su trabajo en el Complesso del Vittoriano, en la Vía di San Pietro in Carcere, hasta el 11 de septiembre. Una mas que buena excusa para volver a visitar esa maravilla de ciudad que es y será siempre ROMA.

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BUEN DÍA A TODOS

Fuentes: Wikipedia.
Capital ARTE.

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