Muchas son las mujeres que plantean y ejercen de forma especial su defensa de lo que son derechos de todo tipo de colectivos, más solo algunas lo llevan a cabo recurriendo al arte, y como en el caso que nos ocupa, a la fotografía.
ZANELE MUHOLI es fotógrafa y activista visual, tal y como ella misma viene a definirse. Nacida en Durhan, en 1972, su trayectoria artística está marcada por su defensa de los derechos de la población negra, queer y transexual, en un país como Sudáfrica, que si bien tiene reconocido el matrimonio homosexual como legal, el hecho cierto es que los ataques a la comunidad LGTBI son muy frecuentes.
Su primera exposición individual la realizó en 2004, en la que planteó su activismo visual, tuvo como escenario la Galería de Arte de Johannesburgo, con el título de Only half of the picture. Sus fotografías captan momentos de una gran intensidad íntima, huyendo de todo enfoque vulgar.
Sus primeras series de fotografías nos adentran en situaciones personales, más con el tiempo la plasmación de hechos colectivos va cobrando prevalencia.
Gracias a su serie denominada Being (2006-2009) obtuvo el primer Premio Casa África 2009, en los llamados Encuentros Africanos de la Fotografía, haciendo especial mención en lo que supone la celebración del amor homosexual.
En todas y cada una de sus series fotográficas Zanele Muholi viene a plantearnos distintos aspectos de lo que considera necesario e imprescindible para el desarrollo de una sociedad igualitaria en la que los derechos de todas las personas, sin exclusión de su identidad sexual, llegue a ser una realidad; en Faces and phaces abunda en el retrato de mujeres negras, de distinta orientación sexual, si bien todas ellas tienen la mirada hacia el frente, mostrando y transmitiendo diferentes emociones.
Con Mis Lesbian (2009) la performance cobra protagonismo en el trabajo de Muholi, pues es ella misma la que se posiciona en diferentes roles, dando una especial visibilidad al colectivo de lesbianas negra.
Con su serie Brave Beauties (2013-2014) viene a mostrarnos de qué forma es posible el empoderamiento de diferentes personas marginadas como consecuencia de su orientación sexual. Es de destacar la importancia en estos retratos de la anatomía como medio de expresión presencial de este colectivo.
La que es la última de sus series, titulada Somnyama Ngonyama (2014-....) tiene como protagonista a la propia Zanele Muholi, reivindicando su orgullo de raza negra, y haciendo una singular crítica de la explotación capitalista y de lo que es la opresión social.
No cabe la menor duda de que Zanele Muholi ha conseguido y ese era su objetivo, sirviéndose de la fotografía como forma de expresión, reivindicar toda una serie de derechos de colectivos LGTBI, pero también de todas aquellas personas que se sienten o han sentido oprimidas por su forma de entender y vivir su propia vida y sexualidad.
Su obra ha sido expuesta en la Bienal de Venecia , la 13 Documenta y en la Tate Modern, lo que nos da una idea de la importancia del mensaje de esta gran artista.
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