Buen día, estimados amigos, el tema que hoy sirve de protagonista al "post", la personalidad y la obra de Winslow Homer, me la recomendó un gran amigo mío, que tiene un blog, también mas que interesante, cuya temática es fundamentalmente técnica y científica.
Mas por el momento, ya que el "post" está destinado a él, pasemos a conocer la vida y la obra de este pintor naturalista estadounidense, al que se considera junto a Thomas Eakins como una de las figuras más emblemáticas de su país en el siglo XIX.
Homer nació en Boston el 24 de febrero de 1836, y se formó como pintor escasamente, asistiendo a clases de pintura del natural en la National Academy Of Design. Sus inicios le llevan a trabajar como ilustrador, en 1859, en revistas como Harper´s Weekly, cuyo trabajo le llevó, a su vez, a ser corresponsal durante la Guerra Civil, en el frente de Virginia.
Fue precisamente entonces cuando pintó el que sería su primer óleo mas que destacado Los prisioneros del frente (1866, Museo Metropolitano de Arte de Nueva York), y en el que podemos reconocer su mas que notable y vigoroso realismo.
Fue precisamente entonces cuando pintó el que sería su primer óleo mas que destacado Los prisioneros del frente (1866, Museo Metropolitano de Arte de Nueva York), y en el que podemos reconocer su mas que notable y vigoroso realismo.
Los prisioneros del frente
Sus mas que deliciosas ilustraciones, sus grabados se pueden definir e identificar por sus formas mas que sencillas, cuyos protagonistas están llenos de vitalidad y destaca en el contraste entre luces y sombras. Todo ello fue un rasgo común de toda su producción a lo largo de su vida.
The red canoe. Acuarela
Baverly Oaks
Es en el año 1856 cuando se decide por trasladarse a Francia durante un año, mas ello no significó la influencia del impresionismo francés.
Sus comienzos con la acuarela, que trabaja de forma tan perfecta como el óleo, lo son en el año 1873. Son sus temas predominantes en su pintura las escenas de inspiración rural o idílica; escenas campestres, niños y jóvenes que desarrollan sus vidas en ciudades en las que la elegancia es denominador común. Entre éstas destacamos Long Branch, Nueva Jersey (Museo Of Fine Arts, Boston, 1869).
Es entre los años 1881 a 1882 cuando pasa una temporada en un pueblo de pescadores, que le sirvió para dar un giro total a su pintura. Nos encontramos con escenas en las que la naturaleza, en sí misma, es la gran protagonista, escenas marinas, de pescadores y de sus familias.
Marina
Northeaster
The Life Line
Establecido en Prout´s Neck, concretamente en la costa de Maine, su producción adquiere un mas que espléndido desarrollo tanto de la técnica como de la temática. A esta época, concretamente, 1886, pertenece su obra Eight Bells (Addison Gallery, Andover, Massachusetts). La escena marina aparece acompañada por un espíritu mas que heroico, tema que deviene como el mas recurrido en su madurez: la lucha del hombre con las fuerzas de la naturaleza.
Eight Bells
Homer pasó muchos inviernos de su vida en Florida, en Las Bahamas y en Cuba, y es precisamente durante este periodo cuando produce pinturas que podrían calificarse como de "pintura rápida", en las que predomina el estilo mas que fresco, espontáneo, con un toque impresionista, mas eso sí, nunca perdería su mas que estrecha relación con el naturalismo.
Su obra La corriente del Golfo, datada en 1899, y que se encuentra en el Museo de Arte Metropolitano de Nueva York), nos ofrece la imagen de un marinero negro que navega en una casi destrozada embarcación, y en medio de un gran oleaje.
La corriente del golfo
Destaca Homer por la mas que esplendidez de su temática y también por la fuerza expresiva de su pintura, la cual ejerció una mas que notable influencia en la pintura realista de los EE.UU.
Para Winslow Homer el contacto con el mar hizo grandes a sus obras, las convirtió en maravillosas obras maestras, y tanto el mar, en su exaltado oleaje, como el ambiente más cálido de las costas de Florida resultan del todo apasionantes para su contemplación.
Winslow Homer conoció, a ciencia cierta, lo que es la Naturaleza y su poder, y gracias a ese conocimiento a llegado a nuestros días, su mas que deliciosa obra de la que todos nosotros tenemos la obligación de velar por su conservación para deleite de la Humanidad.
Three boys in a dory
No hay comentarios:
Publicar un comentario