FELICE BEATO.- LA FOTOGRAFÍA EXPERIENCIA VITAL.

Felice Beato

Bienvenidos a un nuevo tiempo en este espacio que viene a recoger lo que la imaginación, la voluntad, la inspiración y el talento han venido en denominar ARTE.

Una de las facetas del arte la descubrimos, en el día a día, que ha quedado plasmado en fotografías. Es así como la FOTOGRAFÍA se ha convertido no sólo en testimonio de vidas, épocas, etapas, hechos, sino también en documento histórico.

Para FELICE BEATO, también conocido como Felix Beato, la fotografía le llevó a viajar a países de Extremo Oriente, amén de ser considerado como uno de los pioneros de la llamada fotografía de guerra.

Son del todo conocidos sus retratos, escenas de género, fotografías de vistas y panoramas, en particular, arquitectónicos y por supuesto, sus paisajes de Asia.

Felice Beato nació en Corfú, entre 1833 y 1834, falleciendo en Florencia, el 29 de enero de 1909.

Gracias a sus innumerables viajes realizados a lo largo de toda su vida, tuvo la oportunidad de captar y por supuesto, crear toda una serie de imágenes, de los más variados países, y sus habitantes. Y curiosamente, sus fotos captadas durante la Rebelión de la India, en 1857 y la Segunda Guerra del Opio, le situaron entre los conocidos como fotógrafos de guerra.

La calidad de su obra, marcada por escenas de países como Japón, le llevaron a convertirse en un referente para muchos otros que se convirtieron en admiradores de su original producción.

Y es un hecho conocido la existencia de varios fotógrafos que firmaban como Felice Antonio Beato o Felice A. Beato, si bien quedó todo ello aclarado cuando las antedichas firmas lo eran con respecto a fotos que realizaban tanto él como su hermano Antonio Beato (también fotógrafo), que trabajaban juntos. Tanto es así que hoy en día existen dificultades en identificar fotos que fueron captadas por uno como por otro hermano.

La peripecia vital de Felice Beato le llevó a conocer lugares tan extraordinarios como Constantinopla, gran parte de Grecia y Jerusalén. También viajó a Crimea, donde capto imágenes de la Guerra de de Crimea, en 1855.

La India, y ciudades como Delhi, Campore, Meerut, Benarés, Agra, Shimla y Lahore; Egipto, llegando a establecer un estudio fotográfico en Tebas, en 1862; China, alcanzando incluso a Cantón; Hong Kong, Pekín, todo ello documentado por Beato en sus fotografías -concretamente, en Pekín; son de una especial belleza las que nos descubren el famoso Palacio de Verano, Qingyi Yuan (Jardín de las Ondas Claras), una finca privada del emperador chino, y que se componía de pabellones palaciegos, templos y un lago artificial, todo ello rodeado de bellísimos jardines.

LLegó a cubrir la Segunda Guerra del Opio, la primera muestra de documentación de una campaña militar en pleno desarrollo, con especial interés sobre los fuertes de Taku, con secuencias de los efectos de los bombardeos, devastación de edificios y muerte de personas.

Japón fue otra de sus escalas documentadas en imágenes, trabajando junto a Charles Wirgman, que nos ofrecen retratos, paisajes, vistas de diferentes ciudades.

Más también documentó las diferentes expediciones militares de las que formaba parte, entre ellas, a Shimonoseki, la también expedición naval estadounidense a Corea; más no todo su trabajo se limitó a recopilar imágenes de esta naturaleza sino que llegó incluso a poseer tierras en Japón y a participar en numerosos negocios financieros y de comercio de alfombras y bolsos de mujer.

De sus últimos años, y después de una vida plagada de aventuras, regresó a Inglaterra, en 1886, donde dio clases sobre técnicas fotográficas en la London and Provincial Photographic Society. No obstante, su talante le llevó dos años más tarde a regresar a Asia, concretamente, a Birmania, continuando con su labor como fotógrafo de estudio, dirigiendo un negocio de muebles y trabajando en la que fuera su compañía F. Beato Ltd., hasta su liquidación en 1907; poco después falleció.

La fotografía debe a FELICE BEATO el hecho de habernos dado a conocer lugares, que hasta el siglo XIX, nunca habían sido documentados en imágenes de todos los países que recorrió, para las que utlizaba el proceso de colodión húmedo y placas de cristal. Asimismo, FELICE BEATO fue pionero y perfeccionó las técnicas de coloreado de las fotografías, al igual que la toma de panoramas: sus paisajes coloreados son del todo encantadores, y nos muestran un cuidado especial y lo que es también necesario reseñar su espectacularidad.

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Fuentes: Wikipedia.
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Para entender la fotografía. Emma Lewis.