martes, 26 de mayo de 2015

LOS MADRAZO: UNA GENERACION DE ARTISTAS.


M A D R A Z O

Buen día, estimados amigos, es bien difícil hablar de arte español, durante los siglos XIX y principios del XX, y no citar a cuatro generaciones de la misma familia que fueron protagonistas de la vida oficial española: los Madrazo.

Autorretrato de José de Madrazo (1840). Museo del Prado

El primero de ellos, y con el que comienza la saga es JOSÉ DE MADRAZO, (1781-1859), quien bajo la recomendación del obispo de Santander y con la protección del ministro de Estado, Pedro Ceballos, realizó estudios, que le llevaron desde la Academia de San Fernando, hasta el taller, en Paris, del pintor neoclasicista, Jacques-Louis David, gracias a la concesión de una beca. Fue, precisamente, en el taller de este último donde pinto "Jesús en casa de Anás". Becado por el rey dirigió sus pasos a Roma, donde amén de aumentar su cultura artística, se decantó por el estudio de la arqueología, anatomía y matemáticas. Sus dos obras calificadas como neoclásicas por excelencia, fueron realizadas por entonces, "La muerte de Lucrecia", extraviada, y "La muerte de Viriato", datada en 1807, y que podemos admirar en el Museo del Prado.


Jesús en casa de Anás

La muerte de Viriato

El conocimiento de Ingres, le lleva a compartir la autoría de la obra "La disputa de griegos y troyanos por el cuerpo de Patroclo" (1812), que fue destinada al Palacio Monte Cavallo en el Quirinal, en homenaje a la visita de Napoleón. No obstante, José de Madrazo se niega a jurar a Bonaparte, y es encarcelado en el castillo de Sant´Angelo, por poco tiempo. Dicha situación lejos de perjudicarle, le favoreció pues Carlos IV, exiliado en Roma le protegió y llamó la atención de su persona sobre Fernando VII que le nombró pintor de Cámara.


Maria Sandalia de Acebal y Arratia

Durante esta etapa de su vida, José de Madrazo retrata a Godoy, y a varios príncipes europeos, al Papa Pio VII; en tanto su vida personal, conoce su boda con Isabel Kuntz con la que tuvo 11 hijos.
El regreso a España de José de Madrazo da un rumbo radical a su vida, pues será él el encargado de reformar la enseñanza artística, así como la colección litográfica de los cuadros del rey. Fue, precisamente José de Madrazo quien creó el Real Establecimiento Litográfico en los Jardines del Tívoli, en los que se encontraba su propiedad, pues compró los terrenos a Fernando VII.
Por esta época, José de Madrazo se convierte en una personalidad fundamental en la corte española, pues logra el favor de la reina Maria Cristina, y desplaza al pintor Vicente López que lo era hasta entonces.


El amor divino y el amor profano

José de Madrazo fue un hombre y un artista ambicioso, quiso para sí un título de nobleza que no consiguió, pese a ello fue Caballero de Carlos III, Gran Cruz de Isabel la Católica, senador y regidor perpetuo de Santander.
Entre sus obras mas destacadas podemos y debemos citar "Obras en el Museo del Prado" (1839),"El amor divino y el amor profano" (1813), y retratos como el de la "Princesa Carini" (1809), o los de Carlos IV (1813), "Cecilia de Madrazo" (1840), o "El coracero francés".


Cecilia de Madrazo

Destacó, igualmente, en el dibujo, influido inicialmente por David y posteriormente por Rafael, amén de que fue un gran coleccionista de arte, con un especial olfato, y que consiguió como consecuencia de la ruina que la Guerra de la Independencia había traído a muchos aristócratas que tuvieron que desprenderse de sus obras de arte.
Si bien parte de su obra la podemos encontrar en el Senado y el Museo Cerralbo de Madrid, así como sus dibujos en la Biblioteca Nacional, no podemos dejar de criticar su actitud para con el baron Taylor, pues le ayudó a comprar en secreto distintas obras de grandes pintores españoles y así conseguir que pasaran al pais galo.
Su fallecimiento, ocurrido en 1859, fue recogido por distintos medios de comunicación tanto espaloles como franceses, que alabaron su figura y su obra.


Pedro de Madrazo

Luis de Madrazo

Juan de Madrazo

Mas una de las aportaciones mas importantes de José de Madrazo a la historia del arte en España, fueron sus hijos; así Pedro, fue el mas intelectual, y al que debemos el  primer catálogo del Prado; Luis, fue pintor, y Juan, arquitecto, cuya obra fundamental consistió en continuar y terminar la Catedral de León. 


Federico de Madrazo, Autorretrato

No obstante, destaca de entre todos ellos, Federico, que con solo seis años aprendió a pintar, por supuesto, ayudado por su padre, y se convirtió en uno de los retratistas mas importantes del panorama artístico español de finales del siglo XIX.
Fue la de Federico de Madrazo una formación que comenzó en la Academia de San Fernando, para continuar después en Paris, en 1833, al estudio de Ingres. Tras su matrimonio con Luisa Garreta,  volvió a Paris, y después a Roma. Fue precisamente, el interés comercial en Federico de Madrazo el que le llevó a renunciar el trabajo de grandes composiciones, decantándose por el retrato, pues era algo que siempre estaba bien remunerado. En Roma cultivó la amistad del pintor aleman Overbeck y de los españoles Solá y Espalter. Era un hombre que gustaba de las relaciones sociales, para lo cual en su residencia eran mas que frecuentes las veladas y los recitales poéticos, amén de representaciones teatrales, y a estas veladas, precisamente, asistían algunos que luego le servían de modelos para sus retratos, como es el caso de la Condesa de Vilches.


Condesa de Vilches

Retrato de Carolina Coronado

Se hizo con grandes protectores, como el duque de Osuna, y como, en su día, lo fue su padre, fue director del Museo del Prado entre los años 1860 a 1869 y de 1881 a 1894. Su paso por el Museo, en el desempeño de sus funciones, le llevó a hacer grandes reformas en el mismo, introduciendo techos de hierro y ladrillos, tragaluces, encargó a Jareño la famosa escalinata e incluso fue quien introdujo las medidas antiincendios. Eso sí, odiaba a El Greco, mas aceptó las Pinturas Negras, de Goya que el Museo de El Louvre no quiso.


Retrato de Isabel II

Fue la suya una labor incansable para salvar, conservar y aumentar un patrimonio que lo era y lo sigue siendo de la Humanidad; para ello, se propuso ampliar el museo con el Casón y los Jerónimos. Igualmente, fue director de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, desde 1866 y fue promotor del Museo de Arte Moderno, cuya dirección encomendó a su hermano Pedro. Y amén de todo ello fue maestro de muchos pintores, alumnos suyos, entre los que podemos destacar a Rosales, su hijo Raimundo, León Bonnat, León Gerôme ..


Francisco de Asís Borbón

Mas la calidad artística de la familia Madrazo se vio enriquecida con la unión de su hija Cecilia, con Mariano Fortuny, que falleció tempranamente, si bien dejó una mas que deliciosa obra, entre ella, destaquemos ese cuadro "Los hijos del pintor en el salón japonés", que es toda una delicia.


Los hijos del pintor en jardín japones 
(Mariano Fortuny)


No cabe la menor duda que Federico de Madrazo fue un hombre al que le sonrió la fortuna, pues supo y bien, acrecentar su patrimonio, no solo con obras de arte, sino también con propiedades. Era todo el suyo un espíritu cosmopolita, que vivió, viajo y disfrutó cuanto la vida le ofreció al paso. Amaba los toros, cazar y los fuegos artificiales, ésos que rematan cualquier fiesta mundana, y llegó a trabar amistae con Bellini, Chopin y Verdi. 
En su obra, como he dicho, abunda el retrato, y muestra una mas que detallada preocupación por la luz, y cómo reflejar el estado de ánimo del retratado, evidentemente, en su afán por agradar a su modelo.


Gertudris Gómez de Avellaneda


Sin lugar a dudas, su obra maestra es la conocida "La Condesa de Vilches" (1853), si bien, podemos también destacar "La condesa de Muguiro" (1876), y el retrato de "Gertrudis Gómez de Avellaneda" (1957), así como el de el Duque de Medinaceli (1860).


Duque de Medinaceli



Por lo que respecta a su pintura histórica, es fundamental la calidad de la misma, mas la temática es poco original, tal y como podemos apreciar en "El Gran Capitan en Ceriñola", en el Museo del Prado.
Su fallecimiento tuvo lugar en 1894, siendo su cuerpo objeto de profundo respeto y admiración, por todos aquellos que pasaron por el Salon de Columnas del Prado.


Raimundo de Madrazo



Federico de Madrazo fue el padre del tercer gran pintor de la saga Madrazo: Raimundo de Madrazo, que al igual que sus predecesores se formó en la Academia de San Fernando, para continuar su formación en Paris, con Ingres y León Cogniet, y en L´Ecole de Beaux Arts. Mas fue en L´Ecole imperiale de Dessin donde aprendió la pintura al aire libre, y fue el Museo del Louvre, el que le enseño a "copiar". 


La modelo Aline Masson

Fue la suya una vida de gran proyección internacional, de la misma forma que su abuelo y su padre, era hombre de mundo, y amante de las relaciones sociales, y de toda su familia fue el mas famoso, en tanto en cuanto su conocimiento no se ciñó a Europa sino que también abarcó los EE.UU. 
Su vida participó del encanto de Francia y viajó incansablemente, si bien entre 1910 a 1920 se instaló definitivamente en un chateau en Versalles, junto a su segunda esposa María Haum. Y fue precisamente en la alta sociedad parisina en la que entró de la mano de un mas que especial introductor Alejandro Dumas hijo y de Prosper Merimée. No hace falta mencionar que, al igual que sus ancestros, amaba el teatro, la ópera y las fiestas, y cuando venía a Madrid tenía por costumbre acudir a las fiestas en las que estuviera presente la actriz Sara Bernhard.


Reclining Lady

Su carácter abierto le hizo grandes amistades, con pintores de su época como Meissonier, Boldini, Gêrome, Bonnat y Regnault. 
En 1898 inicio un viaje por los EE.UU. que le llevó a conocer distintas ciudades, donde retrató a innumerables personalidades. Su obra destaca por su colorismo y sus retratos nos semajan fotografías, como el de "La Marquesa de Manzanedo" o "La Reina Maria Cristina",así como el que realizó a "La Duquesa de Alba".
Mas también tenía la costumbre de pintar al natural, con la que fue su modelo predilecta Aline Masson.


María Guerrero como Doña Inés


La Reina María Cristina

Y llegamos a la que fue cuarta generación de los Madrazo, en la que destacan dos nombres, el insigne MARIANO FORTUNY Y MADRAZO, hijo Fortuny y de Cecilia de Madrazo, y Cocó de Madrazo, hijo, a su vez, de Raimundo de Madrazo.


Mariano Fortuny y Madrazo


Sobre Mariano Fortuny y Madrazo realicé, en su día, un "post", para mí, delicioso y es de los que conservo mejor recuerdo. -incluiré al final de este texto su enlace-, y por lo que respecta a Cocó de Madrazo, fue pintor, pero también pianista, y al igual que el resto de su antecesores se formó en Paris e Inglaterra. Entre sus amigos mas célebres estaba la Marquesa de Cassati (otro "post", también realizado por mí sobre tan particular señora), y frecuentaba los ambientes gays, amén de ser un gran amigo de Marcel Proust. Mas fue la suya una vida corta, pues falleció utilizando para ello la via del suicidio.


Cocó de Madrazo

No cabe la menor duda que tras esta exposición la obra y personalidad de la saga de LOS MADRAZO ocupa un lugar destacado en este nuestro espacio cultural y artístico, con todo merecimiento.


Fotografía en la que podemos distinguir tres miembros de la familia Madrazo: Luis, el segundo por la izquierda sentado; Federico, el segundo por la izquierda, de pié; y Raimundo, el mas joven, casi un niño, el segundo por la derecha, de pie.
(Fotografía de José Martinez Sanchez, datada entre los años 1855.1860)

BUEN DÍA A TODOS

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http://purakastiga.blogspot.com.es/2014/12/mariano-fortuny-y-madrazo-el-legado-de.html
(Este es el enlace que os lleva a conocer la obra de MARIANO FORTUNY Y MADRAZO, magnífico y multidisciplinar artista).


Fuentes: Wikipedia.
Descubrir el Arte.



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