Como es habitual en este espacio, los temas que comparto con vosotros lectores suelen variar, pues entiendo que es una forma amena de llegar a todo el mundo.
Es por ello que hoy nos vamos a introducir en el mundo de esas mujeres, que la leyenda nos ha hecho conocer como bellísimas guerreras: LAS AMAZONAS.
En la antigua Grecia, el Partenón, que estaba consagrado a la diosa Atenea, y cuya construcción se sitúa entre los años 447 y 432 a.C., tenía una curiosa decoración, y digo curiosa, porque dentro de lo que es los relatos mitológicos o las peleas y combates, sus protagonistas no fueron hombres ni dioses, sino mujeres que pasaron a la historia con el nombre de las amazonas.
Siempre nos ha llamado la atención la existencia de un país en el que solo habitaran mujeres, algo que ha sido y sigue siendo motivo de interés y admiración.
Dentro del universo de lo que son los dioses del Olimpo, las amazonas eran hijas de Ares, el dios de la guerra, y tenían como cometido la conquista de territorios, mujeres sin piedad para con cualquiera que se batiera con ellas.
Es así que si buscamos referencias, la más antigua, podemos encontrarla en la Ilíada, de Homero, donde reciben el nombre de antianiras, o hembras viriles, que destacaban por su belleza, y sobre todo por su valor en la lucha durante la guerra de Troya.
Las amazonas rendían un especial culto a Artemisa, la diosa de la caza, bella y virgen, eternamente joven. Y es justamente la relación con esta diosa la que hizo que las amazonas se entrenaran desde pequeñas con las armas, destacando sobre todo, en el arco y las flechas, la equitación, y la pelea cuerpo a cuerpo.
Y un hecho curioso es que sobre la leyenda de las amazonas se dice que se mutilaban el seno derecho con la finalidad de que no les molestara cuando tenían que tensar el arco. De ahí deriva el término amázones, palabra que está formada por el prefijo griego a- "sin" o "carente de" y zona, "pecho".
Mas por lo que respecta al mundo del arte en el que han sido referente en numerosas obras, aparecen representadas con ambos pechos.
Muy conocidas entre los combatientes guerreros, en la mayor parte de las ocasiones dejaban supervivientes, o también los hacían prisioneros para un "inusual" destino: era el suyo un mero interés reproductivo.
Una vez cumplida su misión, mayormente eran sacrificados, o en su caso, eran considerados como esclavos y no tenían ningún derecho en la sociedad de las amazonas. Y curiosamente, si el recién nacido era niña, pues era bien recibido en la comunidad, si era varón, mayormente, era abandonado o eliminado.
Sobre el lugar en el que habitaban las amazonas se conocen varias teorías, una de ellas era que habitaban en una lejana región de Asia, aunque no es del todo exacta, incluso se hablaba de dos grupos de amazonas, uno de ellos tenía su sede en Oriente, y el otro, estaba afincado en Africa, dirigido por la reina Mirina. En este último caso, las amazonas no vivían solas, sino en comunidad con hombres, aunque éstos se dedicaban exclusivamente a tareas de orden doméstico e incluso a la crianza de los niños.
La leyenda nos habla de la reina Mirina como una gran amazona, que contaba con un ejército de otras 20.000 y que conquistó la Atlántida, aunque su muerte la causó el rey tracio Mopso.
Otra amazona que cuya historia es digna de reseñar es Hipólita, sobre la que circula la leyenda de su cinturón, símbolo de su poder, y objeto de deseo del rey Euristeo, y que encargó a Heracles hacerse con él (uno de los doce trabajos de Heracles).
Para el mundo heleno, la sociedad impuesta por las Amazonas rompe completamente el equilibrio de ésta, pues una amazona se niega a casarse, y en consecuencia, a ser sumisa, y a centrarse en lo que se consideraba el papel de la mujer, el de esposa y madre.
Por este motivo, y por el hecho de la valentía y sus dotes para con el dominio del arco y las flechas, amén de la equitación han pasado a formar parte de una de las leyendas más bellas y significativas de nuestra historia.
Sobre el lugar en el que habitaban las amazonas se conocen varias teorías, una de ellas era que habitaban en una lejana región de Asia, aunque no es del todo exacta, incluso se hablaba de dos grupos de amazonas, uno de ellos tenía su sede en Oriente, y el otro, estaba afincado en Africa, dirigido por la reina Mirina. En este último caso, las amazonas no vivían solas, sino en comunidad con hombres, aunque éstos se dedicaban exclusivamente a tareas de orden doméstico e incluso a la crianza de los niños.
La leyenda nos habla de la reina Mirina como una gran amazona, que contaba con un ejército de otras 20.000 y que conquistó la Atlántida, aunque su muerte la causó el rey tracio Mopso.
Otra amazona que cuya historia es digna de reseñar es Hipólita, sobre la que circula la leyenda de su cinturón, símbolo de su poder, y objeto de deseo del rey Euristeo, y que encargó a Heracles hacerse con él (uno de los doce trabajos de Heracles).
La reina de las Amazonas.
Para el mundo heleno, la sociedad impuesta por las Amazonas rompe completamente el equilibrio de ésta, pues una amazona se niega a casarse, y en consecuencia, a ser sumisa, y a centrarse en lo que se consideraba el papel de la mujer, el de esposa y madre.
Por este motivo, y por el hecho de la valentía y sus dotes para con el dominio del arco y las flechas, amén de la equitación han pasado a formar parte de una de las leyendas más bellas y significativas de nuestra historia.
BUEN DÍA A TODOS
PURA KASTIGÁ
Blog inorporado al
Directorio Hispano de las Artes
Fuentes: Wikipedia.
Muy Interesante.
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