Con este título "RUMBLE FISH", en inglés, traducido como "La ley de la calle", Francis Ford Coppola nos sorprendió con una singular película, rodada en blanco y negro, a excepción de los colores de unos peces de Siam, cuyo universo se reduce a una pecera, de ahí el nombre original del film.
Rodada en 1983, con guión del propio Coppola y basada en la novela escrita por Susan E. Hilton, nacida en Tucsa, Oklaltoma, en 1950, quien abandonó su carrera como escritora para contraer matrimonio, viajando con su marido por España, para después establecerse en los EE.UU.
Con sólo 17 años Hilton se hizo famosa gracias a otra novela Rebeldes, también llevada al cine por el propio Coppola.
Por lo que respecta a la novela está contada en primera persona y en ella somos conocedores de lo que es la marginación social, la insoportable situación familiar de muchos adolescentes que viven inmersos en un mundo que no entienden y al que le buscan no sólo significado, sino una salida, en tanto pasan su tiempo en peleas de pandillas juveniles.
La apuesta de Coppola por esta historia fue un gran riesgo, ya que la rodó cuando estaba prácticamente arruinado, a raíz del descalabro que le produjo la producción del musical One from the heart, un más que rotundo fracaso de taquilla, que le obligó a poner en venta su propia productora, la conocida American Zoetrope.
Es así como Coppola se lanzó con el que sería su siguiente proyecto Rebeldes (The Outsiders), para a continuación rodar RUMBLE FISH.
Y si bien ambas películas fueron seguidas una de otra, entre ambas existen más que notables diferencias, pues en la primera Coppola se acerca más a los clásicos títulos del género, en tanto con la segunda, su aportación al cine de pandillas juveniles y marginación social fue del todo diferente.
Para ello recurrió, en primer lugar, como ya he indicado, al blanco y negro, se sirvió de objetivos de gran angular con resultados expresionistas, y a las conocidas como tomas "time-lapse". Si a todo ello unimos una más fantástica banda sonora, de Stewart Copeland, y fotografía de Spephen H. Burum, el resultado no pudo ser mejor.
En primer plano, Diane Lane
Nicolas Cage y Diane Lane
Una jovencísima Sofia Coppola
Bueno, sí que fue mejor gracias al excepcional reparto: Matt Dylon (Rusty James), Mickey Rourke (El chico de la moto), Diane Lane (Patty), Vincent Spano (Steve), Nicolas Cage (Smokey), el magnífico Dennis Hopper (padre), Diana Scarwid (Cassandra), Chris Penn (B.J. Jackson), Laurence Fishburne (El Enano), William Smith (El policía), Glen Withrow (Biff Wilcox), Tom Waits (Benny), la pequeña Sofia Coppola (Donna), Michael Higgins (Mr. Harrigan), y S.E. Hinton (Hooker on Strip).
Benny (Tom Waist) y Laurence Fishburne
Dennis Hopper
Son del todo explícitas las palabras que pronuncia Benny (Tom Waist), el dueño del bar: "El tiempo es algo extraño. Cuando uno es joven, un niño, el tiempo sobra en abundancia. Uno desperdicia un par de años aquí y por allí.... No importa en absoluto. Y cuando uno es mayor, se dice: sólo me quedan 35 años de vida. Piénsalo: 35 años".
Y ello nos lleva a ser conscientes de cómo estos jóvenes, todos ellos viviendo al ritmo que les marcan las pandillas de inadaptados, no se percatan de ese paso del tiempo, y que Coppola nos ofrece al espectador, haciendo "pasar" en las imágenes de la película las nubes que cubren el cielo a una velocidad superior a la normal, y si observamos, también la continua aparición en escena de relojes, más curiosamente, sin manecillas, en alusión al hecho de no ser conscientes del tiempo que inexorablemente se nos escapa.
La droga, la violencia se ha extendido por las calles, y en la memoria de Rusty James el recuerdo de su hermano mayor, icónico Chico de la Moto, de hecho en los muros de las zonas marginales en las que tienen lugar los encuentros de las pandillas figura escrito "El chico de la moto es el rey". Éste se marchó un día y dejó sin líder a todos aquellos que querían ser como él. Pero El Chico de la moto es único, de ahí que también que el personaje sea daltónico y parcialmente sordo, lo que le hace ver y escuchar al mundo como "su mundo".
La mítica secuencia de los peces de Siam, y su forma de atacarse a sí mismos cuando se ven reflejados en un espejo, no es más que una metáfora de la autodestrucción de todos estos jóvenes inadaptados.
La muerte de El Chico de la moto, a menos del policía Patterson, en tanto intentaba llevar al río los peces de Siam, convencido de que en su propio elemento ese comportamiento autodestructivo no tendría lugar, nos llega a emocionar, en un último gesto de aquél por alcanzar su propia liberación, algo que encarga a su hermano Rusty James: los peces de Siam deben de volver al río y éste último hacia el mar, el deseo que El chico de la moto no consiguió hacer realidad.
Rumble Fish podría ser considerada la historia de un viaje iniciático, hacia el conocimiento y convencimiento de cuanto de absurdo y corrupto existe en este mundo, y su protagonista de excepción, un más que magnífico actor, MICKEY ROURKE, hoy en día, abatido por sus propios excesos, al que la presencia de el siempre genial Dennis Hopper no consigue eclipsar.
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Fuentes:
www.filmaffinity.com
wikipedia.es
https://cinemaesencial.com
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