Todos asociamos la sonrisa, la risa a estados de felicidad, o a situaciones placenteras que nos llevan a expresar el sentimiento que nos producen; no obstante, para YUE MINJUN la sonrisa, o mejor, la risa es un mensaje, una forma de dirigirse a una sociedad que viene a representar un estado de impotencia, falta de fuerza y de participación, afectados, como vemos en la mundo actual, de indiferencia cultural y de toda empatía hacia los demás.
YUE MINJUN nació en Daqing, en la provincia de Heilongjiang, China, en 1962, por lo que debe entenderse ubicado en lo que es la generación artistas que han crecido en plena Revolución Cultural Proletaria (1966-1976), en la que prevalecía la represión y el miedo, y toda enseñanza estaba caracterizada por un modelo ideológico: el comunismo.
La muerte de Mao significó para un gran colectivo de artistas el hecho explorar nuevas formas de entender y manifestar su arte, y todo ello en el epicentro de una sociedad en la que aún perdura el cliché del maoismo.
Su obra se caracteriza por algo único, como es el hecho de que siempre se representa a sí mismo riéndose a carcajadas.
La formación de Yue Minjun que le llevó a graduarse, en 1985, en Pintura al Óleo en la Universidad Normal de Hebei, la compaginó con los más variados empleos, como electricista o extractor de petróleo en alta mar...
Después de graduarse fue profesor de dibujo en North China Petroleum. Su obra ha sido mostrada en diferentes países, así en 1999 lo fue en la Bienal de Venecia.
En 2000, llevó a cabo una exposición en la Galería Chinese Contemporary de Londres, en 2007 una individual simultánea en el Museo de Queens de Arte y en la Asia Society de Nueva York, y en 2008 se inició un proyecto para crear en la provincia china de Sichuan el Museo Yue Minjun.
Su cuadro "Excution" se convirtió en la obra más cara de un artista chino. La Fundación Cartier para el Arte Contemporáneo hizo en 2013 la mayor retrospectiva de un artista chino en Europa con cerca de 40 obras.
La obra de Minjun viene a exponer de forma ácida y del todo clara el autorretrato desde un punto de vista hasta ahora desconocido. Si en su momento se le encasilló dentro del llamado "Realismo Chino", Yue Minjun lo niega; y es que en sus autorretratos observamos la evidencia de la historia no sólo del arte oriental sino del occidental, apostando por cierta influencia surrealista, para lo cual se sirve de pigmentos y escenarios oníricos, empleando el cuerpo, su propio cuerpo, con formas retorcidas.
Y es que en sus más que variadas representaciones es la risa la que tiene el total protagonista, y ello con independencia de las actitudes y paisajes que compone, lo que viene a traducirse en una clara crítica social y política de la cultura china frente a lo que es la cultura occidental.
Y el hecho cierto es que la obra de Yue Minyun no sólo abarca la pintura acrílica, sino también se sirve de la escultura, la acuarela y el grabado.
Nada mejor que una sonrisa, una risa patética para hacer crítica total de una dictadura capitalista que se oculta bajo una ideología que dice ser comunista.
Con la risa crea una representación de un estado personal y general de impotencia, de la práctica desaparición de lo que es el individuo como tal, favoreciendo el colectivismo.
Asimismo, la risa es una fuerte arma frente la adversidad, nos hace sabernos más tolerantes y transmite una total sensación de placer y felicidad, si bien no esconde esa doble intención respecto del dramatismo y de lo que significa el sufrimiento.
Y aunque la máscara de la risa está siempre presente en su propia y repetida representación, quien observa es del todo consciente del dolor que existe detrás de ella.
Disfrutad.
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Directorio Hispano de las Artes
Fuentes:
www.abc.es/cultura
https://historia-arte.com
Atlas ilustrado del Arte Contemporáneo.
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