Pura Kastigá: WOLFGANG TILLMANS.- LA FOTOGRAFÍA DE LA VIVENCIAS.

jueves, 19 de diciembre de 2019

WOLFGANG TILLMANS.- LA FOTOGRAFÍA DE LA VIVENCIAS.

La fotografía de WOLFGANG TILLMANS está considerada como un referente dentro de lo que es el arte conceptual alemán, un trabajo en el que reivindica lo directo y lo auténtico, y todo ello justamente reconocido con el famoso premio Turner, con el que fue galardonado con tal sólo 32 años, en 2000, siendo el primer artista, fotógrafo y no británico, en recibirlo.

Sus primeros trabajos, en los años 90, vinieron a definirle a modo de cronista de una juventud alternativa, que vivía a tope la noche en discotecas a ritmo de acid house, y de reivindicaciones a favor de los derechos de los homosexuales.

A través de sus fotografías Wolfgang explora sobre la identidad, sirviéndose de un lenguaje poético visual, trazando líneas divisorias entre lo que es nuestra individualidad y el colectivismo social, haciendo un llamamiento a todo lo que nos une.

Es así como viene a hacer reinterpretaciones de lo que es el retrato, el paisaje y la naturaleza muerta.

Pese a que ha sido criticado en numerosas ocasiones en función de lo que se ha venido a considerar como superficial en imágenes provocativas, Wolfgang Tillmans siempre ha manifestado su intención de que su fotografía es un llamamiento hacia la reflexión para lo cual se sirve de la intimidad y la naturalidad.

No existe intención de provocar, sino sencillamente de modificar la forma de mirar, de acercarse a lo que es realmente hermoso y que la sociedad acepte como tal.

Wolfgang Tillmans nació el 16 de agosto de 1968, en Remscheid, si bien en 1987 trasladó su residencia a Hamburgo donde, amén de trabajar como telefonista, empezó a hacer "estudios" con imágenes sirviéndose de una fotocopiadora, y adentrándose en lo que se considera la subcultura rave.

(A las raves que empezaron a desarrollarse se las vino a llamar también Acid House Parties, siendo eventos masivos en los que eran convocadas muchas personas, y ello trajo como consecuencia que a finales de los años 80, el término citado "rave" diera nombre a toda una subcultura que fomentó el movimiento acid house).

Siendo un adolescente soñaba con ser astrónomo, ya que sentía una especial atracción por las estrellas, un mundo desconocido, y a la vez lleno de luz.

Revistas como i-D, Tempo, Spex y Prinz publicaron diferentes trabajos de Tillmans, para continuar su trayectoria en Bournemouth, estudiando fotografía y posteriormente en Londres. En 1994 se trasladó a Nueva York, donde permaneció durante un año.

En 1997, la muerte a causa del sida de su compañero, marcó profundamente su fotografía, hasta el punto de que le dedicó toda una serie.

En 1998 trabajó como profesor en la academia de bellas artes de Frankfort.

Los retratos de Wolfgang Tillmans nos aproximan a un mundo en el que la vulnerabilidad es protagonista, la delicadeza, la fragilidad que supone ser "humano".

Más no sólo el retrato ha sido objeto de la fotografía de Tillmans sino también el paisaje, lugares del mundo que marcaron su vida, su tiempo, que le regalaron momentos inolvidables.

Ante esta actitud hasta cierto punto subjetiva de lo que es su particular visión del mundo, la política también forma parte de los intereses fotográficos de Tillmans, afanándose en lo que podría significar encontrar una "verdad universal", y la total imposibilidad de hacer realidad ese sueño.

Su trabajo no sólo impacta desde el punto de vista visual, sino que lo hace también desde el social, adoptando actitudes que, en ocasiones, han sido duramente criticadas.

Para este innovador artista ninguna de sus obras cumple su función hasta que el espectador se siente sacudido, alterado con su visión, porque todas y cada una de ellas están concebidas para realizar una labor: ser espacios en los que todo tipo de pensamientos puedan encontrar algo en común.