Es del todo seguro que la mayoría de vosotros lectores habéis asistido alguna que otra vez a una sesión de ilusionismo o magia, quedando del todo sorprendidos por las circunstancias, hechos que constatamos y que no sabemos cómo ni de qué forma se presentan ante nosotros.
La figura del ilusionista, del mago, es en puridad un artista, que a través de la distorsión artificial de la realidad, nos deja completamente perplejos. El hecho cierto es que la magia, en sus inicios, se relacionó con la hechicería, de ahí que a muchos de los llamados magos se les denominara también como "hechiceros".
La magia es un término que deriva de la palabra magi, un elemento religioso del antiguo pueblo bávaro, concretamente, del celta. Muchos curanderos, conocidos también como chamanes, eran considerados magos, ya que afirmaban curar enfermedades, y de ser capaces de ver o intuir aquello que escapaba del alcance de la mayor parte de las personas.
Y no deja de ser cierto que los primeros vestigios que tenemos de la magia provienen de Egipto, donde en el milenio III a.C., el faraón Keops, quien ordenó la construcción de la Gran Pirámide Giza, convocó a uno de sus súbditos, que obedecía al nombre de Dedi, y que afirmaba ser capaz de revivir a los animales decapitado,s. Dedi, el mago, efectivamente, consiguió revivirlas, -o, al menos, hacer que lo parecieran- y esta historia aparece narrada como tal en el denominado Papiro de Westcar, teniendo la consideración de ser el truco de magia más antiguo que se conoce del mundo.
A lo largo de la historia han sido conocidos por sus cualidades como magos e ilusionistas diferentes personalidades, como Gonin, quien a finales del siglo XVI fuera el primero de toda una dinastía. Más sería a lo largo de la Edad Media y gran parte de la Edad Moderna la magia vino a relacionarse con la alquimia y la astrología, si bien muchos de los que la practicaban eran perseguidos, especialmente por parte de la iglesia católica, al ser consideradas como actividades demoníacas o de brujería; el resultado de ello fueron los enjuiciamientos y consiguientes ejecuciones de quienes la practicaban.
Fue ya durante el siglo XVIII cuando estos considerados magos, eran hombres de ciencia, pues en sus espectáculos recurrían a los adelantos científicos para conseguir sorprender a un público del todo entregado. Es así que surgió una nueva profesión: la del mago o ilusionista, siendo los trucos más recurrentes aquellos que consistían en hacer desaparecer y aparecer objetos.
En el caso del mago holandés E. Chambly, quién recurría a los trucos del espiritismo, sus espectáculos utilizaban diferentes trucajes fotográficos.
En el caso del mago, toda una estrella en EE.UU. durante las décadas de 1910 y 1920, HOWARD THURSON sentó las bases de lo que serían los grandes espectáculos de magia, sirviéndose de amplios escenarios y los más variados elementos, desde personas a todo tipo de cosas, y tenía una especial habilidad la de lanzar cartas desde su posición elevada en el escenario directamente a las manos de los espectadores.
Su espectáculo de magia era tan grande que necesitaba de ocho vagones de tren para transportar todo el atrezzo del mismo.
Thurson se hizo muy famoso a razón de su espectáculo en el que hacía levitar a una joven a la que se conocía como la "Levitación de la dama de Karnac".
CLAUDE ALEXANDER CONLIN (1880-1954) era conocido como ALEXANDER, C. ALEXANDER, ALEXANDER THE CRYSTAL SEER Y ALEXANDER THE MAN WHO KNOWS, fue un mago especializado en mentalismo, que llevaba a cabo actos de lectura, utilizando para ello una bola de cristal y ataviado con túnica de estilo oriental. Amén de espectáculos públicos, también hacía sesiones particulares de lecturas, y llegó a convertirse en un personaje muy bien pagado, tal vez el mejor pagado de su época, y el que sentó las bases de ciertas técnicas o efectos de escenario, para los que se servía de elementos eléctricos. Sus "trucos" nunca llegaron a ser revelados, y entre sus clientes contaba con numerosas estrellas del espectáculos, entre ellos Jackie Coogan, Harold Lloyd y Clara Bow.
Los grandes magos de la actualidad consideran que fue HARRY HOUDINI el más célebre escapista de todos los tiempos, si bien también llevó a cabo diferentes trucos de magia de la conocida como "magia de salón".
Harry Houdini fue un mago estadounidense de origen húngaro, cuyo nombre auténtico era Ehrich Weiss, y desde niño participó en espectáculos circenses ambulantes, mayormente como trapecista.
Su magia la practicaba al aire libre y rodeado de miles de espectadores, quienes veían al Gran Houdini cómo era capaz de deshacerse de las cuerdas y esposas con las que le ataban, o escapar de baúles, previamente cerrados con cadenas y candados.
También eran habituales sus espectáculos en los que era colgado por los pies desde edificios elevados y atado de pies y manos, dentro de una camisa de fuerza; uno de sus espectáculos más impresionantes fue el que le llevó a salir, en menos de un minuto, de una caja sellada con acero y arrojada al puerto de Nueva York; tal fue su popularidad que llegó incluso a aparecer en varias películas.
La gran diferencia de Houdini con respecto a los que se decían "magos" es que Harry Houdini tenía por costumbre explicar sus trucos y nunca se refería a ellos como hechos sobrenaturales.
Curiosamente, si hay algo que rodeó siempre el misterio fue la muerte de Houdini, según la versión oficial, Harry Houdini se retó a una prueba física con un joven boxeador, y éste le dio un fuerte golpe en el estómago que le provocó la rotura del apéndice, dando lugar a una peritonitis, que le provocó la muerte a los nueve días. No se llevó a cabo autopsia alguna, por lo que a día de hoy, aún nos queda la incógnita.
A lo largo del pasado siglo XX, uno de los más famosos magos fue DAVID COPPERFIELD, quien gracias a los más extraordinarios adelantos técnicos consiguió llevar la ilusión de la magia por todo el mundo.
DAVID COPPERFIELD, cuyo verdadero nombre es David Seth Kotkin nació el 16 de septiembre de 1956 en Metuchen, Nueva Jersey, e inició la que sería una brillantísima carrera profesional con sólo 12 años, siendo la persona más joven que consiguió ser admitida en la Sociedad Estadounidense de Magos, y con 16 años ya era profesor en la Universidad de Nueva York.
Sus ilusiones más reconocidas incluyen la desaparición de la Estatua de la Libertad, levitar sobre el Gran Cañón y atravesar la Gran Muralla China.
Su popularidad a nivel mundial la consiguió no ya sólo por la calidad de sus espectáculos sino por el hecho de que unió el aspecto comercial al mundo del ilusionismo, realizando 20 especiales para la televisión, 10 giras mundiales y dos libros.
¿Qué es la magia? Un engaño enfocado. Pero el engaño destinado a entretener.
(DE LA PELÍCULA "AHORA ME VES...")
Fuentes:
Wikipedia.
www.cartomagia.com
HISTORIA Y VIDA.
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