jueves, 26 de abril de 2018

TINA BLAU.- LA BELLEZA DEL PAISAJE IMPRESIONISTA (AUSTRIA).


Tina Blau

Buen día, estimados lectores de este espacio en el que pretendo llevar la belleza de todo lo que el arte puede abarcar, tanto en su aspecto creativo como natural a todos los que nos emocionamos y sentimos con él.
Es así que hoy dedico este artículo a una mujer pintora, austriaca, pionera en lo que se considera arte Impresionista, y que participó, asimismo, de las que fueran las propuestas de la Escuela de Barbizon: TINA BLAU.




Tina Blau nació en Viena, en 1845, en el seno de una familia en la que su padre era médico en el Cuerpo Médico Militar Austro-Húngaro, un hombre inteligente que, desde el primer momento, sabedor del talento de su hija, la apoyó, pues la pintura era una de sus vocaciones frustradas.
Ello permitió a Tina Blau estudiar con grandes profesores como Antal Hanely, August Schaeffer y Lindenschimit, por citar algunos, en Munich.



Contrajo matrimonio con el también pintor Heinrich Lang, especializado en escenas de caballos y batallas.
Determinante en su formación y desarrollo fueron los largos veranos que pasó durante los años 1873 y 1874 en la colonia húngara de artistas de Szolnolnok.
Después de un par de años durante los que compartió estudio con el que fuera, a la vez, su profesor Willhelm Lindenschmit, entre 1875 y 1876, llevó a cabo la que fuera su primera exposición artística en la Osterreichischen Kunstverein, participando en la también prestigiosa Kunsterlhaus, obteniendo un renombrado éxito tanto por parte del público como de la crítica.




Fue durante su estancia en Munich, en 1979, coincidiendo con la Primera Exposición Internacional, tomó contacto directo con la obra de la ya conocida Escuela de Barbizon, que se convertiría poco después en un referente para su producción artística.
No obstante, su obra evolucionó hacia el impresionismo, convirtiéndola en exponente de dicho movimiento en su Austria natal.




La principal característica de su obra tiene como temática los paisajes de Viena y sus alrededores, más fue enriquecida en lo que se refiere a técnicas gracias a sus más que numerosos viajes realizados por Bohemia, Moravia y Transilvania, convertidos en fuente de inspiración.
Su primera exposición individual tuvo lugar en el año 1890, en la Munich Kunstverein.
Una de sus más bellas obras, la denominada El Prater en primavera, consiguió ser galardonada en el Salón de París, de 1892.




Un años antes el fallecimiento del que fuera su esposo, la llevó a viajar por innumerables paises, conocer y disfrutar de los paisajes y la belleza natural de Holanda, Francia o Italia.
Una vez más señalar la importancia de la luz, el color, y una especial calma, sosiego que desprenden sus pinturas, todas ellas nos invitan a detenernos y saborear esa naturaleza tan deliciosa que TINA BLAU no obsequió a todos los amantes de la belleza.






Establecida, definitivamente, en Munich, fundó la "Wiener Frauenakademie", junto a Alga Prager, Rosa Mayreder y Karl Fedem, cuya finalidad fue la de enseñar arte a mujeres, y donde así lo llevó a cabo hasta su muerte en el año 1916, a la edad de 71 años.



El mundo del arte está plagado de grandes y excelentes artistas mujeres, silenciadas, en gran medida, durante mucho tiempo, pues hagamos que su obra sea no sólo conocida, sino reconocida por el público en general. Sin duda el mejor tributo a todas aquellas pioneras de tan maravillosa vocación.

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Directorio Hispano de las Artes


Fuentes: https://art-y-cultura.blogspot.com
Wikipedia.


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