jueves, 18 de septiembre de 2014

CLAUDE MONET: EL MAESTRO DE LA LUZ.

Claude Monet-1901

Buen día, amigos, parece que el otoño empieza a hacer de las suyas, al menos, en esta mi ciudad, pero ya se sabe, todo pasa, y después de un mas que delicioso verano, volvemos a esa estación que para algunos -entre ellos yo- resulta tediosa. Pero, como cuento con el interés que no decae por mi blog y mis aventuras por al mundo del arte, pues que me deleito hoy, y espero que vosotros también, con la vida y la obra de ese MAESTRO de la LUZ que fue CLAUDE MONET.

Mujer con paraguas

Madame Monet con su hijo

No cabe la menor duda que la contribución de CLAUDE MONET a que el movimiento impresionista creciera y se estableciera como tal, en el contexto artístico europeo, es del todo definitiva. 
Nacido con el nombre de CLAUDE OSCAR MONET en 1840, fue la suya una familia de comerciantes parisinos, si bien al poco tiempo se trasladaron a vivir a Le Havre.
Nuestro joven Monet empezó como aprendiz, pues dotes artísticas no le faltaban, en el estudio de Jacques-François Ochard, en el que tuvo la ocasión de conocer a Eugène Boudin, un artista que tenía por hábito el hecho de pintar al aire libre. Esta circunstancia de pintar en contacto directo con la naturaleza influyó en Monet hasta el final de sus días, y de la misma dan buena prueba sus obras. Fue gracias a la atención que le prestó Boudin cómo Monet empezó por pintar marinas y paisajes.

Paisaje

Paisaje

Con tan solo 19 años viaja a Paris, y allí se encontró realmente impresionado, pues, acudió a la Academie Suisse, y fue donde trabó amistad con Camille Pisarro. Mas como ya he indicado anteriormente, el trabajo en el estudio no era lo suyo  y empezó a relacionarse con otros pintores como Bazille, Renoir y Sisley. Este grupo de amigos tenía por costumbre salir a pintar al bosque de Cahilly-en-Bière, que estaba situado en los alrededores de Barbizon.


Regatas

En 1870 contrae matrimonio con Camille Doncieux, con la que ya tiene un hijo. No obstante, las dificultades económicas por las que pasa el matrimonio les obligó a marcharse a Londres, y es allí donde conoce la pintura de Constable y Turner. La impresión que de ambos pintores causó en Monet fue muy importante, fundamentalmente porque quedó gratamente sorprendido por los colores y la forma en que de éstos hacían expresión en la Naturaleza.
Fue precisamente en Londres, cuando Monet conoce al que será su marchante durante muchos años, amén de comprador y coleccionista de su obra Durant-Ruel.

Camille Monet

El año siguiente visita Holanda y poco después, y gracias que, al fallecer su padre le dejó una pequeña herencia, pudo establecerse en Arguenteil, y hasta allí llegaron también Manet y Renoir, quienes empezaron a trabajar conjuntamente.
En 1874, Monet se estrena en una exposición, presentando por vez primera junto con ambos, y lo hace con un cuadro "Impression Soleil levant".

Impression Soleil levant

Claude Monet descubre la luz a través de sus primeras marinas, con las que inicia su trayectoria por el movimiento impresionista, el mar, el cielo, el paisaje eran tratados en cada uno de sus cuadros como elementos independientes, hasta el punto de de hacer que la luz incidiera de forma extrema y se convierte en la protagonista absoluta del cuadro. Es por ello, que, a veces, nos da la sensación que es, esa LUZ, la que desplaza a todos los elementos del cuadro. Sus colores son claros, suaves, lo que nos da una imagen de transparencia. Los objetos no son plasmados con una profundidad propia, sino que se yuxtaponen delicadamente.

Path under the roses relisses


Mas a pesar de que la fama de MONET va en aumento, no lo es así su economía.
Es en la segunda exposición conjunta que llevan a cabo todos los impresionistas, en el año 1876, donde Monet presentó nada mas y nada menos que dieciocho pinturas, y en 1877,  treinta y una. En 1880 hace una exposición individual en la que presenta dieciocho pinturas, en la galería de la revista "La vie moderne".
Llegado este momento de su vida, Monet se decanta por sacarle todo el partido a su capacidad artística mediante la representación del movimiento y el color de las grandes ciudades, abundando en el dibujo de las nuevas tecnologías; es por ello que montó su caballete en la estación de trenes parisina de Saint Lazare, donde el movimiento de las gentes, de los trenes, producía una bulliciosa y quizás confusa atmósfera, eso sí, con su idéntica forma de pintar disuelta y el mismo cromatismo en los colores.

The Gare Saint-Lazare

Gare Saint-Lazare

No obstante, la pasión de Monet fue siempre, durante toda su vida, los paisajes, gozando en captar, de cada momento, un instante preciso, como si fuera una "foto" captada en un instante,una "instantánea", y pintada. Como ya he manifestado Monet rechazada rotundamente la pintura de estudio. Es por ello que sus bocetos captaban lo esencial, por lo que, en cierta forma, la suya es una pintura que podría definirse como realista, pues no capta el momento, sino lo esencial de la misma de cada uno, el instante decisivo.
Como consecuencia de todo ello, en 1880, Monet rompe definitivamente con el movimiento impresionista, lo que no implicó que siguiera manteniendo la amistad con los representantes de dicho grupo. Su siguiente época nos presenta a un Monet interesado en pintar paisajes, pero en un tono mas oscuro, y naturalezas muertas.

 Paisaje

Es entre los años 1892 a 1894, cuando Monet, pintando de forma relajada, se dedica a que de sus pinceles vieran la luz veinte vistas diferentes de la Catedral de Rouen. Pese a que todos los cuadros tienen el mismo motivo, cada uno es distinto, por la sencilla razón de la luz que incide sobre la obra. A Claude Monet ya no le interesa el retrato de personas, sino que da el protagonismo en sus cuadros a temas de los que lo que nos interesa es, única y exclusivamente, el tratamiento de la luz. 


Cathedral de Rouen

En 1899 comenzó con su serie de lirios de agua y nenúfares, y este fue precisamente el tema que empleó en ocho murales que regaló al estado francés entre los años 1915 y 1924. El colorido de estos cuadros nos transmiten una sensación de que la luminosidad vuelve con mas fuerza a protagonizar su obra, y que ponen al alcance de nosotros, espectadores, todo un mundo ideal, tranquilo, marcado por una magia que contagia a quien le observa.


Nenúfares

Claude Monet muere el 6 de diciembre de 1926 en Giverny.

Estimados amigos, como bien hemos podido comprobar estamos ante uno de los mas grandes maestros de la pintura, un hombre que amó esencialmente la luz de la Naturaleza, y la forma en que esa luz se proyectaba sobre los objetos, las formas, las personas, dándoles distinto carácter según el instante de la exposición. CLAUDE MONET vivirá siempre entre todos los amantes de la pintura, como aquél que sirviéndose de la luz convirtió esta en protagonista absoluta de su obra. Lo que veamos, a través de esa luz, es cuestión de interpretación y de admiración por la belleza de la Naturaleza y de su pintura.


BUENOS Y LUMINOSOS DIAS

1 comentario: