LEJANÍA
Mi sentido de la
distancia para con
las personas, los
objetos, las emociones,
es condición necesaria,
aún no suficiente
para una discreta vida
social.
Con ello acierto a
decidir
sobre aspectos
fundamentales
de mi restringido
interés.
No hay dos vidas
iguales,
tal como dos rectas solo
por una vez
se cruzan en un mismo
punto.
Con cada uno de nosotros
se mide el tiempo,
y compartir lleva
implícito
perder algo solo nuestro.
Yo he aprendido,
por la observación de la
desdicha,
a ser explícitamente
egoísta.
Rosa Freyre del Hoyo.
Foto: Sally Mann.
BUEN DÍA A TODOS
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