Hoy nos vamos de viaje, si os apetece seguirme, por supuesto, y nos situamos en una de las más antiguas ciudades "mágicas" de Oriente Medio.
Se nos presenta recortada en los acantilados formados a base de roca arenisca de vetas rosadas en la región de Wadi Araba, en Jordania, y como creo que ya habéis adivinado, nos encontramos frente a las tumbas y monumentos que nos muestra PETRA, una ciudad que conserva los restos de la que fuera gran capital para los Nabateos, y que además, son toda una muestra de su más que habilidosa ingeniería.
PETRA es un más que significativo enclave arqueológico, y su nombre proviene del griego -evidentemente, no puedo escribirlo en griego-, pero significa concretamente "piedra". Y tanto mas significativo es el hecho de que no se trata de una ciudad construida a base de piedras, sino que está excavada y esculpida en ella.
Los canteros llevaron a cabo la talla de los monumentos de Petra en los altos acantilados, y para ello no utilizaron ningún tipo de tecnología; eso sí, se sabe, por restos encontrados que empezaban tallando la parte mas elevada del edificio y luego iban descendiendo hasta llegar al suelo, para lo que se servían de escalas o cuerdas que les facilitaban el ascender a los niveles superiores.
Para todo ello hacían uso de picos y cinceles hasta obtener una superficie plana, para a continuación dibujar el diseño de la construcción. Una vez finalizada la decoración, el interior cúbico de las diferentes cámaras era vaciado directamente desde el acantilado.
Los restos de esta ciudad más célebres son las construcciones que fueron labradas en la misma roca del valle, conocidos como "hemispeos", y fundamentalmente, los edificios que reciben el nombre de Al-Khazneh (el Tesoro), y el Deir (el Monaterio).
El Deir (dibujo del monasterio)
Estado actual
Fueron numerosas las tribus que hicieron de Petra una ciudad con una historia que ha llegado hasta nuestros días, pues se da por hecho su fundación hacia finales del siglo VIII a. de C., por los edomitas, si bien los nabateos la ocuparon en el siglo VI a. de C., y que hicieron de este enclave un punto singular en la ruta de las caravanas que transportaban especias, entre ellas el incienso a países como Egipto, Siria, Arabia y también hacia países enclavados en el sur del Mar Mediterráneo.
Petra se convirtió en una ciudad de espíritu cosmopolita, pues los nabateos sabían y conocían, aceptando los estilos de vida y las diferentes culturas de los distintos pueblos que realizaban la conocida ruta comercial.
Es por ello que su arquitectura es un claro ejemplo del eclecticismo de diferentes culturas como la egipcia, la romana y la griega.
El antedicho Al-khazneh tiene un singular diseño helenístico, más también se puede observar en él la influencia de las culturas antes citadas. Y aunque su nombre nos habla de "El Tesoro", en el mismo no se contenían riquezas de ninguna clase, sino que tenía un fin funerario. El nombre en cuestión procede de un mito local: El Faraón, persiguiendo a Moisés a través de Edom escondió su tesoro en la urna.
Y, entre las diferentes edificaciones que hoy podemos contemplar las siguientes:
1.- Qasr al-Bint, el palacio de la hija del faraón, si bien su función principal fue la de servir como templo principal, para el culto de sendas deidades nabateas, Dushara y al-Uzza.
2.- Ad-Deir, que es el más grande de todos los monumentos de Petra, y que está situado en una plataforma en Jebel ad-Deir, destinado a cenotario del rey Obodas I.
3.- Tumba del Obelisco, a la que da su nombre los cuatro obeliscos que se encuentran situados en su fallada, y enclavados sobre la también fachada de Bad el Siq Tricilinium o salón destinado a los festejos, que fue realizado años mas tarde.
4.- El Teatro, realizado siguiendo un esquema del todo romano, si bien conserva el método nabateo de tallar toda la estructura en la roca.
5.- Tumba de la urna, es ésta la primera de 5 fachadas, a las que se conoce como las tumbras reales. Y se asoma sobre la calle de la columnata de Petra, desde una repisa tallada en Jebel a-Khubta.
La mayor parte de estos grandes monumentos se construyeron durante el reinado del rey Aretas IV Philopatris (del año -9 al año 40).
Durante varios siglos la importancia de esta singular ciudad permaneció inalterable hasta que el siglo VI d. de C. marcó el cambio de las rutas por las que se llevaba a cabo el comercio y ello, junto con los numerosos terremotos que padeció, trajo como consecuencia el abandono de sus habitantes.
Más fue gracias al explorador Johann Ludwig Burckhardt quien descubrió PETRA para el mundo occidental, hacia el año 1812, estando ocupada por la tribu Bdoul, quienes vivían en cuevas que se encontraban en los alrededores de las tumbas y monumentos, y así permanecieron hasta el año 1980, pues el gobierno les construyó unas viviendas para que pudieran llevar una vida digna, eso sí, cerca de las ruinas.
Testimonio de las diferentes expediciones que llegaron hasta PETRA son quedan en distintos documentos, grabados y dibujos del arqueólogo francés León de Laborde y Louis Mauricio Adolphe Linant de Bellefondos, que se realizaron durante un viaje en 1828, y que aparecen en el libro "Voyage de l´Arabie Pétrée" del año 1830. Gracias a los descubrimientos que se realizaron en esta expedición se obtuvo el pimer mapa de la ciudad .
A ésta siguieron muchas otras expediciones que nos han ido mostrando los más que sublimes aspectos de este gran enclave histórico, amén de que se descubrió cerca de PETRA otra ciudad nabatea, HÉGRA.
Ciudad de Hégra
La información que nos han facilitado las inscripciones realizadas en las rocas de PETRA y HÉGRA, y después de diferentes trabajos muy especializados han llevado a la conclusión de que la escritura se realizaba de derecha a izquierda, y que el alfabeto se componía de veintidós consonantes. Según estas investigaciones el estilo de esta escritura deriva de la de una escritura en papiro creada por los escribas, y que este estilo continuó usándose en el grabado de las inscripciones en la roca, para las que se sirvieron del martillo y del cincel.
Su moneda, emitida durante dos siglos por los nabateos, imitaban a la moneda griega.
Este conjunto monumental histórico está considerado desde el 6 de diciembre de 1985 como Patrimonio Mundial de la Unesco, amén de que la zona que la rodea es, igualmente, desde 1993, Parque Nacional arqueológico.
Desde el 7 de julio de 2007, PETRA está considerada como una de Las nuevas siete maravillas del mundo moderno.
Alfabeto nabateo
Desde el 7 de julio de 2007, PETRA está considerada como una de Las nuevas siete maravillas del mundo moderno.
La ciudad oculta de PETRA
El viaje a PETRA es de obligado cumplimiento para todos los amantes de la historia y del arte, de las civilizaciones y de la capacidad para crear belleza de todos aquellos que nos precedieron.
Es un destino imprescindible al que solo se puede acceder atravesando un pasadizo rocoso.
PETRA es el lugar mas visitado de Jordania, un enclave turístico excepcional, más dada la inestabilidad económica y política existente en la zona, el turismo se ha resentido.
Mosaicos en el suelo
La magia presente en esta singular y exclusiva ciudad debe conservarse y para ello debemos perseverar en el hecho de que no se produzcan actos tan deleznables como los que destrozaron Palmira, ya en el recuerdo.
Algo que entre todos debemos exigir de los organismos internacionales que velan por lo que es Patrimonio de toda la Humanidad.
BUEN DÍA A TODOS
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Fuentes: Wikipedia.
Vive la Historia.
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