domingo, 21 de enero de 2018

FRANZ VON STUCK.- EL PINTOR DE LA "FEMME FATALE".

Autorretrato

Buen día.

Conozcamos la vida y la obra, un tanto desafiante para el tiempo que le tocó vivir, de FRANZ VON STUCK, pintor, escultor, grabador y arquitecto alemán cuya técnica se puede considerar integrada dentro de lo que es el concepto simbolista y del art nouveau.

Joven fauno

Retrato de hombre

Nacido en Tettenweis, Baviera, el 23 de febrero de 1863, desde su infancia demostró una gran habilidad para con el dibujo y la caricatura. Su formación le llevó a cabo en Múnich, donde estudió entre los años 1881 a 1885, y donde viviría toda su vida.
Inicialmente conocido gracias a sus viñetas publicadas por el Fliegende Blätter, así como diferentes diseños destinados a programas y libros de decoración, fue la primera de sus pinturas, con el nombre de "El guardián del paraíso", exhibida en el Palacio de Cristal de Múnich la que le valió una medalla de oro.

El guardián del paraíso

Detalle

Fue cofundador del movimiento secesionista de Múnich, y en 1892 ejecutó la primera de sus esculturas, Atleta. En 1893 su fama se multiplicó gracias a una obra excepcional EL PECADO, sobre la que posteriormente nos detendremos.
Todo ello le valió para conseguir una medalla de oro por pintar en la Feria Mundial de Chicago, en 1893. Dos años más tarde inició su trabajo como profesor en la Academia de Múnich.

Atleta

Amazona


A raíz de su matrimonio con una viuda norteamericana, Mary Lindpainter, en 1897, desarrolló sus habilidades como arquitecto y construyó la que sería su residencia, a la vez que estudio: La Villa Stuck, la cual a partir de 1968 fue abierta al público, siendo hoy en día su museo.
En esta villa participó no sólo en su construcción como arquitecto, sino también en lo que fue su decoración, incluido mobiliario, lo que le valió una nueva medalla de oro en la Feria Mundial de París, en 1900.


Interior de la Villa

Museo Villa Stuck

Entre sus alumnos artistas de la categoría de Klee o Kandinsky, su obra fue posteriormente desprestigiada a raíz de la exaltación que Hitler hizo de la misma, al considerarla que validaba la masculinidad germánica, si bien Stuck jamás participó ni vio con buenos ojos el nazismo.

Inferno

Frank von Sulk está considerado el pintor de las ensoñaciones más oscuras, de los placeres de la carne, la lujuria, el pecado y el erotismo más rotundo, basando su obra, sobre todo, en la mitología, y sirviéndose del estilo de Arnold Böcklin, son las suyas figuras, personajes que nos resultan, a primera vista grandes y pesados, sirva de ejemplo su obra "Luzifer".

Lucifer

Medusa

Sus desnudos femeninos están marcados por la seducción de la que venía a considerarse "femme fatale", consiguiendo hacer del espectador un total "voyeur", disfrutando plenamente del vicio y la lujuria, eso sí, de forma totalmente pasiva. 

El beso de la esfinge

Otra de sus obras que abunda en esta tendencia es Salomé (1906), destacando la figura de la bailarina semidesnuda, sobre un fondo de luz, y que se complace ante la cabeza decapitada del Bautista.
Y es curioso el hecho de que para Stuck la obra debía de contar con un marco apropiado, de ahí que considerase éste como parte imprescindible y a la que prestaba especial atención, formulándolos él mismo, y añadiendo detalles decorativos, inscripciones e incluso tallas.

Salomé


EL PECADO supuso en su época toda una innovación en la imagen que nos presenta, el torso de una mujer desnuda que nos desafía desde la semioscuridad, y sobre la que una serpiente permanece enroscada.
El sentimiento de placer que nos produce esta imagen radica, en gran medida, en la forma de percepción de la obra, abundando en los aspectos eróticos, que permitían al espectador abrirse paso hacia posibles perversiones sexuales, como el sadismo o el fetichismo.


Existe un punto de conexión entre El Pecado, y la obra literaria La Venus de las pieles, de Leopold von Sacher-Masoch, si bien Stuck consigue resultar mas fascinante, al arriesgar en pintura, en imagen frente a lo que puede decirse o contarse.
El poder de Von Stuck con esta su obra EL PECADO reside en la forma y medida que puede alcanzar la insinuación, la delgada línea que separa lo que se muestra y lo que se oculta, entre lo aparente y lo real.
Von Stuck nos invita a practicar el voyerismo, para nada como algo negativo o amoral, y que sirve para dejar paso a la siempre eterna curiosidad del individuo sobre todo lo que se esconde, una más que necesidad básica que nos lleva, siempre, a comprender, después de analizar.







Una gran obra, óleo sobre lienzo, datada en 1893, con unas dimensiones de 94,5 x 59,5 cm, y con la que podemos practicar el "voyerismo", en Neue Pinakothek, en Múnich.



Blog incorporado al
Directorio Hispano de las Artes




Fuentes: Wikipedia.
www.20minutos.es
Arte moderno. Taschen.



No hay comentarios:

Publicar un comentario