El término "musa" nos remite a la mitología griega, pues las musas, hijas de Zeus y Mnemosine, eran las patrocinadoras de las artes, nueve en total: Clío, de la historia; Euterpe, de la música; Talía, de la comedia; Melpómene, de la tragedia; Terpsícore, de la danza; Erato, de la elegía; Polimnia, de la lírica; Urania, de la astronomía, y Calíope, de la retórica y la poesía.
Desde un punto de vista metafórico la palabra musa es utilizada para describir a la mujer por la que sentimos una especial atracción y también la que nos inspira en la creación artística.
La protagonista de nuestro espacio de hoy es una musa real, que lo fue para un grupo de pintores que se identificaron con un movimiento conocido como The Pre-Raphaelite Broterhood, (la hermandad de los prerrafaelitas), constituida en 1848 por William Holman Hunt, John Everett Millais y Dante Gabriel Rossetti.
Su visión estética y su temática se vinculaba al arte gótico y a la obra de los pintores del renacimiento italiano anteriores a Rafael, pintando fundamentalmente alegorías, para lo que se sirvieron desde textos bíblicos, literarios e incluso leyendas de la edad media.
ELIZABETH ELEANOR SIDDALL ROSSETTI, nacida en Londres el 25 de julio de 1829 y fallecida el 11 de febrero de 1862, conocida como LIZZIE SIDDAL fue una poeta y además MUSA de dos grandes artistas prerrafaelitas: John Everett Millais, y del que fuera su esposo, Dante Gabriel Rossetti (quien, por cierto, eliminó una "ele" de su apellido, convirtiéndolo en SIDDAL).
Lizzie Siddal nació en el seno de una familia humilde, desconociéndose si fue o no a la escuela, aunque lo cierto es que desde muy niña sintió una gran admiración por la poesía; trabajó durante su juventud en una sombrerería, siendo descubierta por el artista británico Walter Howell Deverell.
Con apenas veinte años Lizzie Siddal se convirtió gracias a su singular belleza en una de las primeras modelos góticas "prerrafaelitas", a lo que indudablemente contribuyó su esbelta figura, así como su espléndido cabello rojizo; amén de ello su rostro era de una dulzura excepcional y sus ojos entre verdes y azules le aportaban una imagen del todo diferente hasta lo que por entonces era considerado como sujeto de representación.
Lo cierto es que LIZZIE SIDDAL llamaba poderosamente la atención por su "aspecto" entre mágico y alejado de la realidad.
Sin lugar a dudas la obra por la que más se reconoce a Lizzie Siddal es OPHELIA de John Everett Millais (1852); para su realización Millais mantuvo a Lizzie sumergida en una bañera con agua durante todo un invierno, representando el ahogamiento de Ophelia. Se dio el caso de que Millais recurría a situar velas encendidas debajo de la bañera de agua helada, a fin de calentarla, más ello no evitaba que ese agua, después de horas de posado de Lizzie se enfriara y fue así que la joven llegó a enfermar gravemente de una neumonía.
Más fue su esposo, Dante Gabriel Rossetti para quién posó en un mayor número de ocasiones, sobre todo, a partir de 1853, para sus cuadros de Dante y Beatriz, amén de numerosos bocetos realizados a lápiz. La pareja se convirtió en inseparable, eludiendo todo tipo de relación social, si bien lo cierto es que Rossetti procuraba no presentarla a su familia dada la procedencia humilde de Siddal.
No obstante, Dante y Lizzie contrajeron matrimonio, después de diez años de relación, el 23 de mayo de 1860, en la Iglesia de Saint Clement, en Hasting, sin amigos ni invitados; la novia, cuya salud era muy delicada, tuvo que ser llevada en brazos a la iglesia. Los celos y la depresión, ante la certeza de infidelidades por parte de Dante, mermaron aún más la salud de Lizzie, aunque también era ésta una excusa que ella utilizaba para retenerle, amén de su adicción al láudano.
Durante todo este tiempo, Lizzie Siddal aprendió a pintar, y se decidió por escribir poemas. Sus trabajos alcanzaron un cierto éxito, ya que su firma figuraba como la única mujer participante en una exposición del grupo prerrafaelita celebrada en Londres, en 1857.
Después de un embarazo cuyo bebé prematuro murió, la depresión se asentó definitivamente en Lizzie Siddal.
Un nuevo embarazo, dos años más tarde, no llegó a término, pues Lizzie Siddal se suicidó con una sobredosis de láudano, siendo encontrada por Rossetti junto a una nota de la que se deshizo, ya que los suicidas no se podían enterrar según el rito funerario cristiano.
La traumática situación vivida por Dante Gabriel Rossetti culminó con enterrar a su joven esposa con sus poemas inéditos hasta entonces, como forma de expiar la culpa que sentía como consecuencia de las sucesivas infidelidades. Siete años después Rosseti se arrepintió de ello debido a problemas en su visión, y quiso exhumar el cuerpo de Lizzie, recuperando el cuaderno.
Los poemas de Dante Gabriel Rossetti vieron la luz junto con otros más en 1870.
Para todos los que admiramos las grandes obras de los pintores prerrafaelitas es todo un descubrimiento reconocer no ya solo la personalidad de ELIZABETH SIDDAL, en su faceta de musa, sino también el hecho de que fue una artista de reconocido prestigio.
Hasta que mi amor pudo retornar,
Movimientos de la Pintura. Larousse
https://www.barnebys.es
https://www.ecured.cu
No hay comentarios:
Publicar un comentario