TOMÁS SÁNCHEZ: LA DULCE PLACIDEZ DE UN SUEÑO.

Buen día.

De nuevo la pintura marca pauta en el contenido del tema que vamos a desarrollar hoy, y lo es teniendo en cuenta que es una de las formas mas deliciosas de expresarnos y de comunicar aquéllo que sentimos, aunque, a veces, necesitamos de un cierto tiempo para comprender y llegar a entender el mensaje del autor.

Son ya muchos los pintores que he tenido la ocasión de disfrutar, junto a vosotros, en este espacio, que hoy dedicamos al cubano TOMAS SÁNCHEZ REQUEIRO.

Tomás Sánchez Requeiro nació en Aguada de Pasajeros, Cienfuegos, el 22 de mayo de 1948, y amén de pintor es grabador, cultivador del genéro pictórico dedicado al paisajismo. 

Quizá os haya parecido significativo la frase que he unido a la presentación, en la entrada, de Tomás Sánchez, "la dulce placidez de un sueño", pero un hecho mas que cierto es que la experiencia de la meditación ha marcado de forma contundente la vida de este excepcional artista, así como su visión de la percepción del mundo.

Y es algo mágico, el hecho de que sus imágenes se mueven en atmósferas que parecen "congeladas" en el tiempo, del todo acogedoras e íntimas, y que nos atraen por su claridad y precisión.

Tomás Sánchez nació en el seno de una familia de clase media, siendo el mayor de dos hermanos. Su padre obrero, y su madre, ama de casa, de la que Tomás heredó esa especial sensibilidad por la pintura. 

Con 16 años marcha a La Habana, para estudiar en la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro, en 1964. Mas, tras abandonar aquélla, en 1967 se matricula en la Escuela Nacional de Arte (ENA), graduándose en 1971, y ese mismo año gana el Primer Premio de Dibujo del Salón Nacional de Artistas Jóvenes.

Considerado como artista de vanguardia, nos muestra en su obra un especial interés por el ser humano y por el entorno en el que vive, siendo la suya una apuesta por ofrecer una imagen del paisaje como lenguaje plástico. 

En su producción nos encontramos con un especial interés, revestido de añoranza, por los paisajes desparecidos, el bosque virgen, y el estado natural antes de la llegada del hombre y la invasión de la Naturaleza. Es precisamente esta defensa por la conservación del medio ambiente la pauta que señala la dirección de su obra, y nos proyecta, para dicho fin, un paisaje subjetivo e íntimo, ofreciéndonos para ello una visión mas que cercana a la fotografía.

Es el suyo un paisaje del todo amable que consigue hacer frente a la destrucción que produce el ser humano y el desarrollo de la civilización.

Su trazo es nítido, de una deliciosa resolución y sencillez, cuyo resultado es la composición de un mundo de ensueños, alentado por sus experiencias y su capacidad introspectiva.

Desde que finalizó sus estudios y hasta el año 1976 Tomás Sánchez fue profesor de la Escuela Nacional de Arte, y Jefe de Cátedra de Grabado; un año antes, en 1975 es galardonado con el Primer Premio en Pintura y el Primer Premio en Litografía del III Salón Nacional de Profesores de Instructores de Artes Plásticas den la Habana. 

Su trabajo adquiere una nueva dimensión cuando es nombrado diseñador escenográfico y de muñecos de Teatro para niños, dependiente de la Dirección de Teatro del Ministerio de Cultura; ello le conduce a integrarse en el Grupo de Marionetas de la UNESCO.

Por su obra Desde las Aguas Blancas consigue el Premio de la XIX Edición del Premio Internacional de Dibujo Joan Miró, y gracias a ello acierta a exponer su obra en la Fundación Joan Miró, Centre de´Estudis d´Art Contemporani en Barcelona.

Su mas que significativo trabajo ha sido partícipe de muchas exposiciones, unas individuales, otras colectivas, en mas de treinta paises y ha sido, igualmente, galardonado con el Premio Nacional de Pintura, de la I Bienal de La Habana, en 1984, la Medalla de la V Bienal de Arte Gráfico Americano, Cali, Colombia, en 1986 y la Mención de Honor, en la I Bienal Internacional de Pintura, de Cuenca, Ecuador, en 1987.

Conocido y admirado en países como México, Estados Unidos, Japón, Italia y Francia, sus exposiciones mas significativas han sido Tomás Sánchez, Retrospectiva en el Museo Nacional de Bellas Artes, en La Habana, en 1985; Tómas Sánchez. Different Worlds, en el Museum of Art Ft. Lauderdale, Florida, USA, en 1996, y su deliciosa celebración de su sesenta cumpleaños con Tomas Sánchez Retrospectiva, en mayo de 2008, en el Museo Contemporáneo de Monterrey México.

Tomás Sánchez Requeiro lleva la naturaleza en la suya propia, su corazón late a ritmo de verdes paisajes y encantadores atardeceres, en los que luz va iluminando todos y cada uno de los elementos que conforman la perfección que consigue la Naturaleza viva. Es el suyo un paseo por la belleza que resalta de las plantas, de las flores, de los ríos y de las aguas, y en cada instante su alma queda prendida en las imágenes que nos retrata.

Metáforas de paraísos perdidos hace mucho tiempo por una Humanidad, cada vez mas industrializada, recuerdos de forma de sueños solo accesibles mediante la memoria.

Epicuro nos hizo una especial llamada hacia la Naturaleza, en el sentido de que solo podríamos ser y sentirnos libres si le prestábamos la debida atención, y por ello había situado en el umbral del jardín de la escuela en la que impartía su conocimiento, un lema: "AQUÍ EL DELEITE ES EL SUMO BIEN".

Solo el sosiego del alma se consigue con la perfecta conciliación del individuo con la Naturaleza, y para ello TOMÁS SÁNCHEZ nos ofrece una más que significativa invitación.

BUEN DÍA A TODOS

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Fuentes: Wikipedia.
Album.Letras-Artes.
Tomás Sánchez. Transcender el tiempo/Revista Excelencias.