Salvator Mundi (Leonardo da Vinci)
Cuando mencionamos la obra -impresionante en todos los sentidos- de Leonardo da Vinci, se nos viene a la mente la pintura más famosa del mundo, sin lugar a dudas la conocida como Mona Lisa o La Gioconda, en gran medida gracias a su más que enigmática sonrisa.
Leonardo, humanista del renacimiento, como heredero de la tradición florentina, artista-ingeniero, persigue la perfección clásica produciendo una total revolución de la pintura del siglo XVI, así como de los siguientes; viene a marcar el paso del Quatrocento, con figuras como Botticelli, al Cincuecento, con Rafael.
De sus investigaciones sobre la pintura nos regala la creación de nuevas veladuras y el nacimiento de lo que se conoce como "grupo piramidal". Y es más, concluye con la revolucionaria técnica del sfumato, su claroscuro, la perspectiva de la atmósfera, el singular tratamiento de la luz y la sonrisa que emerge de cada uno de sus retratos.
Más sobre otra obra de este polifacético genio del Renacimiento también ha existido cierto misterio, el cuadro que obedece al nombre de SALVATOR MUNDI.
Desde que en 2017 fuera comprado en Christie´s por el rey de Arabia Saudita, por la suma de 450.312.500 USD (la obra más cara jamás vendida) el cuadro no ha vuelto a ser visto en público.
Más su historia anterior es mucho más compleja e interesante y merece una detenida lectura.
SALVATOR MUNDI nos muestra a Cristo, con una vestimenta renacentista, dando la bendición con la mano derecha levantada y dedos cruzados, en tanto su mano izquierda sostiene una esfera de roca cristalina, lo que viene significar su papel como salvador del mundo, en tanto la "esfera" representa los cielos.
Cierto es que existen diferentes versiones, si bien han sido atribuidas a muchos de sus discípulos.
Tan sólo 12 años antes, la pintura fue adquirida por la irrisoria cantidad de 10.000 euros en una venta inmobiliaria en Nueva Orleans, por un grupo de distribuidores de arte, entre los que se encontraba Robert Simon, especialista en viejos maestros. Lo curioso es que la pintura en cuestión estba excesivamente sobrepintada lo que daba la impresión de que era una copia.
Dianne Dwyer (restauradora)
Tuvieron que pasar más de cinco años, y después de que la pintura fuera restaurada por Dianne Dwyer Modestini, en la Universidad de York, la autenticara como una pintura de Leonardo. De esta forma, entre noviembre de 2011 hasta febrero de 2012 fue expuesta en la National Gallery de Londres.
Siguiendo su trayectoria, en 2013 fue adquirida por el marchante de arte suizo Yves Bouvier, por 75 millones de dólares, en la que fuera una venta privada en Sotheby´s, Nueva York y posteriormente vendida a un coleccionista ruso Dmitry Rubolovlev, por 120 millones de dólares.
Tras ser sucesivamente exhibida en Hong Kong, Londres, San Francisco y Nueva York, fue subastada en Christie´s, en noviembre de 2017.
Subasta Christie´s
Entre los aspectos, estudiados detenidamente y que contribuyeron a confirmar la autoría de Leonardo da Vinci del Salvator Mundi están la posición del pulgar derecho, el más que delicioso efecto sfumato, típico de muchas obras de Leonardo, la forma en la que se ha trabajado el pelo, entre otros; aspectos ya más técnicos han sido los pigmentos y el panel de nogal sobre los que se ejecutó la obra en cuestión.
Para uno de los mayores investigadores y expertos de la pintura de Leonardo, Salvator Mundi, el conocido Martin Kemp, la obra en cuestión "tiene esa clase de presencia que tienen las obras de Leonardo... esa extraña rareza que manifiestan las pinturas de Leonardo".
No obstante, uno de sus mayores misterios, ya desvelados, fue la posibilidad de que el orbe fuera de cristal sólido.
Más estudios realizados por investigadores de la Universidad de California llegaron a conclusiones en sentido totalmente contrario: la esfera de cristal sostenida por la mano de Salvator Mundi estaba totalmente "hueca".
Es así como "eso explicaría su aparente falta de distorsión de fondo y sus tres puntos blancos", después de haber creado un modelo virtual. De hecho, "Al sintetizar imágenes bajo configuraciones que varían las iluminaciones y las propiedades del material de la esfera, probamos si es ópticamente posible producir una imagen que muestre la esfera de forma similar a como aparece en la pintura".
Sus resultados vienen a mostrar que una "representación ópticamente precisa que coincide cualitativamente con la de la pintura es realmente posible utilizando materiales, fuentes de luz y conocimientos científicos disponibles para Leonardo da Vinci alrededor del año 1500".
Según estos mismos estudios de la Universidad de California, la esfera tiene un radio de 6,8 centímetros y estaba 25 centímetros por delante de la figura de Jesús en la pintura. El orbe en cuestión no podría tener más de 1,3 milímetros de grosor.
En base a los innumerables métodos empleados las sombras en la pintura nos indican la presencia de una fuente de luz desde arriba, aunque también otra difusa más general. Por lo que son los pliegues del vestido de Cristo que pasan por detrás de la esfera -que, por cierto, no aparecen distorsionados- resulta que Leonardo conocía cómo funcionaban los orbes de vidrio, pues también fue un estudioso de la óptica.
Conclusiones: "Nuestro análisis sugiere que Leonardo entendió estas propiedades ópticas de las bolas huecas y cómo evitar distraer las distorsiones ópticas de la representación de los pliegues de la túnica del sujeto".
Sólo un genio de la categoría de Leonardo da Vinci habría errado a la hora de plasmar en una pintura un orbe sin conocer las propiedades de éste, lo que nos viene a confirmar que amén de un excepcional pintor, era un magnífico científico.
Los cuadros, las obras de arte, encierran grandes secretos... su descubrimiento está a nuestro alcance si contamos con medios y conocimientos.
Todo ello es cuestión de avanzar en las posibilidades que el ser humano posee, en su curiosidad por conocer y abarcar aspectos, en gran medida ocultos, pero que pueden y deben ser estudiados.
Disfrutad de esta delicia de obra, y del genio del Renacimiento: Leonardo da Vinci.
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Fuentes:
Wikipedia.
https://es.historia.nationalgeographic.com.es
https://www.lavanguardia.com.
Excelente.
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