Buenos dias, amigos todos, empezar un post como el de hoy, me llena de una emoción profunda. La emoción que resulta de contemplar, inicialmente, el rostro bellísimo, de esta gran mujer y profesional del periodismo: GERDA TARO, mas sin embargo, albergo dentro de mí otra emoción aún mas fuerte, la de su dedicación a una causa, por la perdió la vida, el periodismo de guerra, y el descubrimiento que nos hizo de un fotógrafo excepcional: Robert Capa.
Ello no implica que Gerda Taro fuera ni mejor ni peor que CAPA, es sencillamente, que la vida, no le dio, en su discurrir, la oportunidad de demostrar toda la CAPACIDAD Y POTENCIAL que encierraba la visión que a través del objetivo de una cámara supo dar al mundo de lo que es la gran "miseria y dolor" de una guerra.
Quizás he empezado este artículo por el final, pero no puedo reprimir este sentimiento que me hace empatizar con la fuerza moral de esta mujer y con el testimonio que nos ha dejado.
Esta es su vida y parte de su obra.¿Me acompañáis?
GERDA TARO es el pseudónimo de Gerta Pohorylle, nacida el 1 de agosto de 1910, en Stuttugart (Alemania) y fallecida, prematuramente, en El Escorial (España), el 26 de julio de 1937. Sus padres eran judíos polacos y ella, pese a que su posición económica la situaba dentro de un estrato social medio, participó desde muy joven en movimientos socialistas y obreros.
Fue una mujer pionera en el fotoperiodismo, y ejerció como tal en los frentes de la Guerra Civil Española. Eran habituales sus trabajos en los periódicos de izquierda franceses, pues ya la señalaban como uno de los mas significativos exponentes del nuevo periodismo, no sólo por la temática de sus fotografías, sino por el aspecto emocional que conseguía captar y transmitir con un solo "clik".
Nuestra joven Gerda se formó en la Königin-Charlotte Realschule de Stuttugart, en el Internat Villa Florissant de Lausana y en la Höhere Handelsschule (Escuela Superior de Comercio) de Stuttgart. Poco después, en el año 1929, se traslada a Leipzig, en donde prosigue su formación en la Gaudig Schule.
(Imposible dejar de admirar su belleza)
Toda vez que sus ideas iban en consonancia con movimientos socialistas y obreros, el gobierno nazi ya la consideraba "peligrosa", y después de permanecer detenida, en 1933 marcha a París, donde comienza a trabajar con el psicoanalista René Spitz.
Un hecho fundamental en su vida tiene lugar en setiembre de 1934, cuando conoce a Endre Ernö Friedmann, húngaro de nacimiento, pero que vive en París y que obedece al nombre de André. Este joven también intentaba, por entonces, hacerse un hueco en el mundo del fotoperiodismo; ambos iniciaron una relación sentimental y éste último enseñó a Gerda técnicas fotográficas.
Esto tiene lugar en el año 1935, cuando Gerda se convierte en la "representante" que necesitaba "André" para comercializar su obra.
De esta forma, entre ambos, "crean" o "conciben" un nombre: el de un personaje llamado ROBERT CAPA, al que "inventan" como conocido fotógrafo originario de los EE.UU. llegado a Europa para hacer publicidad de su obra. Ello, como toda novedad que las gentes acogen con el interés propio por falta del debido conocimiento, funciona perfectamente, y poco a poco, van recibiendo encargos, empezando a ganar dinero con ello. Es de significar que Gerda Taro no apostó por este pseudónimo hasta que "André" firma sus obras con el nombre también pseudónimo de ROBERT CAPA.
GERDA TARO Y ROBERT CAPA
Mas un triste acontecimiento histórico tiene lugar, el estallido de la Guerra Civil Española, de tal forma que ambos se trasladan a España para cubrir el conflicto, como fotógrafos de guerra, precisamente para la Revista "VU", iniciando una trayectoria que empieza en Barcelona y va cubriendo el frente de Aragón, el de Madrid, para proseguir su viaje hacia el Sur, al frente de Córdoba. Es precisamente, en el frente de Córdoba, cuando Robert Capa capta la foto que le hizo famoso en el mundo entero, el 5 de septiembre de 1936, "Muerte de un Miliciano".
Muerte de un miliciano- Robert Capa
Pasan unos meses en los que tanto Gerda como Robert realizan diversos viajes por Europa, mas en Febrero de 1937 vuelven de nuevo a España y dedican sus reportajes a fotos que hacen sobre el buque de guerra Jaime I, así como los que realizan sobre las minas de mercurio de Almadén. Prosiguen su viaje a Madrid y allí fotografían las trincheras de la Ciudad Universitaria.
Es precisamente, en el año 1937 cuando la pareja firma sus reportajes con el nombre de "reportaje capa & taro", siendo el mas importante de ellos el publicado por la Revista Regards, el 18 de marzo de 1937.
Se produce, como consecuencia del trabajo periodístico, una separación en la pareja, pues Capa vuelve a París, ya que ha conseguido un trabajo con el periódico francés "CE SOIR".
Precisamente este distanciamiento marca el inicio para Gerda Taro de su personal trayectoria como fotógrafo, recibiendo numerosos encargos que firma como "photo taro", y sus reportajes son publicados por revistas y periódicos de la categoría de "Regards", "Ce soir" y "Volks-Illustrierte". En plena Guerra Civil española va cubriendo los distintos frentes y nos ofrece testimonios de su presencia.
Nuestra intrépida reportera
Entrenamiento de una miliciana
A pesar del distanciamiento inicial, tanto Gerda como Capa vuelven a reunirse, en Paris, en Madrid. Ambos se alojan en el hotel Florida de Madrid, donde coinciden con Ernest Hemingway, John Dos Passos y Herbert Mathewus, del New York Times. Poco después, regresan juntos de nuevo a París. Es allí donde participan en la manifestación del 1 de mayo, y si bien, cada uno toma distintos caminos, pues si bien Capa marcha a Bilbao, Taro viaja a Valencia, coincidiendo con el bombardeo de los fascistas, el 14 de mayo de 1937, del que realiza un nutrido reportaje. Poco después, ambos vuelven a reunirse en Navacerrada, cerca de Segovia, donde tuvo lugar la ofensiva republicana de la que nos dio crónica Ernest Hemingway, en "Por quien doblan las campanas".
Los trabajos fotográficos de la pareja se siguen multiplicando, prácticamente, no dan abasto, gracias a la meticulosa y precisa crónica de lo que es y supone una guerra civil.
Niño con gorra de la FAI
Dos soldados republicanos transportando un herido
Infatigable y demoledora Gerda
El 4 de julio de 1937, en Valencia, tanto Taro como Capa realizan un reportaje sobre el Segundo Congreso Internacional para la Defensa de la Cultura. Este último regresa a Paris, en tanto que Gerda se decide por cubrir la batalla de Brunete. El día 7 de julio de 1937 se une a un grupo de escritores para cubrir el frente de Guadalajara, regresando, poco después a Paris, para celebrar el Día de la Bastilla, con Capa. Mas de nuevo vuelve a Madrid, y se desplaza junto con un compañero de profesión Ted Allan a una posición bélica situada entre Villanueva de la Cañada y Brunete. Es allí cuando ambos suben a un coche que se pone en marcha y resultan heridos al chocar con un tanque republicano. GERDA TARO cae al suelo, en el preciso momento en el que el citado tanque echa marcha atrás y cae sobre ella.
La rueda del tanque la destrozó internamente, por lo que tuvo que ser trasladada de urgencia al hospital ingles de El Goloso de El Escorial, en el que murió pocas horas después, el 26 de julio de 1937, tan solo faltaban seis dias para que cumpliera 27 años.
Noticias de su muerte
Crónica del suceso
El cadáver de Gerda Taro es expuesto en la Alianza de Madrid, lugar al que acuden multitud de escritores, artistas y personas que conocían su obra y su espíritu de mujer libre y luchadora por los derechos humanos.
El 29 de julio es trasladado el cuerpo a Paris, donde el Partido Comunista Francés la declara "mártir" antifascista, y dos días mas tarde es expuesto en la Maison de la Culture de Paris. Sus restos reposan para siempre en el cementerio de Père-Lachaise.
GERDA TARO por ROBERT CAPA
Su último reportaje
ESTA ES, EN DEFINITIVA, LA HISTORIA DE UNA GRAN MUJER, DE ESA MUJER QUE ABUNDA, EN MUCHOS ASPECTOS DE LA VIDA: LA MUJER QUE NUNCA SE DEJA ABATIR
BIENVENIDA POR "SIEMPRE" A ESTE NUESTRO BLOG.
BUEN DÍA A TODOS Y NO RENUNCIÉIS NUNCA A LO QUE
VUESTRO CORAZÓN OS INVITE A GOZAR.
Fuentes: Wikipedia.
La Maleta Mexicana: Gerda Taro.
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